Josep Maria Fusté, legendario jugador del Barça durante diez temporadas, ha muerto este jueves con la edad de los ochenta y dos años. Este mediodía, el Fútbol Club Barcelona ha anunciado su muerte. Fusté fue uno de los referentes del club azulgrana durante los años 1962 y 1972, tramo en el cual jugó 406 partidos y marcó 117 goles.
Nacido en Linyola, llegó al Barça con solo doce años. Posteriormente, estuvo cedido durante una temporada a la Osasuna (1961-62), puesto que tuvo que hacer el servicio militar en Pamplona. Como jugador del primer equipo debutó oficialmente el 10 de junio de 1962 en la final de la Copa de Ferias y estuvo diez años en la disciplina azulgrana. Después del Barça jugó dos temporadas en el Hércules, donde acabó su carrera.
Tras de colgar las botas siguió ligado al mundo del fútbol y al Barça, en qué fue el máximo responsable de la Agrupación de Veteranos hasta el año 1989. Y desde el año 2010 fue asesor de la junta directiva del club.
También conocido como la Liebre de Linyola
Fusté también era conocido popularmente como la Liebre de Linyola, municipio en el cual nació. Lo definen como una persona muy carismática y que era querida por todo el mundo. Deportivamente, en su etapa en el Barça contribuyó a la consecución de tres Copas del Generalísimo (1963, 1968, 1971), una Copa de Ferias (1966) y una Copa de Campeones de Ferias (1972). Además, con la selección española consiguió la Eurocopa de 1964.

El presidente del Barça, Joan Laporta, también ha lamentado su muerte con un emotivo mensaje: «Mi sentido pésame a la familia y amigos de Josep Maria Fusté, un hombre de Club, figura legendaria del Barça y alma de la Agrupación de Jugadores del FCB durante muchos años. Descanse en paz».