Lo Girona Fútbol Club ha devuelto a la Liga, después de la parada del Mundial, con un buen empate. El equipo catalán ha estrenado la segunda parte de esta particular temporada, recibiendo a Montilivi el equipo revelación de los últimos años, el Rayo Vallecano de Andoni Iraola. Y ambos conjuntos han hecho honor en estos días navideños, porque se han regalado ocasiones y goles. En la primera jugada del partido, Sergio Camello ha aprovechado un grave error defensivo de los locales. Después, Taty Castellanos ha empatado de penalti, Isi Palazón ha vuelto a avanzar los madrileños, y finalmente, Samu Sáiz ha establecido el empate nuevamente desde los once metros (2-2).
Era un día señalado. El conjunto de Míchel venía de una derrota esperpéntica: cayó eliminado de la Copa en el campo del Cacereño, un equipo de la cuarta división. Por lo tanto, había la oportunidad de reivindicarse, y demostrar a su gente que aquello fue un resbalón aislado. Y así ha estado. No se ha podido devolver a la Liga con una victoria, pero sí con una gran demostración de carácter y de competitividad.
Está claro que todo ha empezado de manera horrible. Camello ha aprovechado un grave error del lateral Miguel Gutiérrez, quien ha cedido hacia atrás la pelota. La pelota no ha ido a parar a su compañero, sino al rival, que ha batido Gazzaniga. A partir de esto, el Girona se ha rehecho. El Rayo ha hecho una fuerte presión, pero los catalanes se han podido desempallegar. Oriol Romeu ha movido bien la pelota en el centro del campo, y Yan Couto ha estado muy vertical. También Iván Martín. El vasco, de hecho, ha provocado un penalti en la media hora de juego, después de que Fran García le pisara dentro del área. Ha chutado Castellanos y ha marcado Castellanos.
Con el gol, la inercia ha cambiado del todo. Antes del descanso, el Rayo ha regalado dos ocasiones que podrían haber significado la remontada del Girona. Lejeune ha fallado en la hora de rechazar una pelota, y Romeu ha perdonado el gol al haber resbalado, y después Ciss ha errado y ha propiciado un contraataque que ni Castellanos ni Rodrigo Riquelme han podido aprovechar.
En la reanudación, el Girona ha continuado igual, pero lo Rayo ha vuelto a golpear primero
En la reanudación, el guion se ha mantenido igual. El Girona ha continuado perdonando ocasiones. Y esto ha estado así, hasta que un genio ha dicho bastante. Después de una recuperación de Unai López, Camello ha asistido a Isi Palazón, y el atacante ha hecho una gran definición ante Gazzaniga para poner el 1-2 al marcador. En este escenario, el Girona ha continuado remando. Riquelme ha obligado Dimitrievski a lucirse, y Míchel ha reaccionado. Ha hecho un triple cambio que ha dado resultado. Y es que pocos minutos después, los suyos han provocado un nuevo penalti. Castellanos ha chutado y el rival Lejeune lo ha tocado con la mano dentro del área.
Esta vez, el penalti lo ha chutado y lo ha marcado Samu Sáiz, que era uno de los protagonistas del triple cambio. Ha sido el séptimo penalti que ha chutado lo Girona esta Liga. Y es un dato que habla muy bien del trabajo del equipo rojiblanco, puesto que para provocar penales hay que llegar con frecuencia al área rival.
En los últimos minutos, los técnicos han creado un bonito duelo de viejos rockeros: han entrado Cristhian Stuani y Radamel Falcao al césped. El colombiano no ha podido aportar mucho a su equipo, puesto que lo Rayo estaba defendiendo con uñas y dientes el empate. El uruguayo, en cambio, ha podido culminar la remontada, pero Dimitrievski se ha vuelto a lucir. Finalmente, cuando el match ya agonizaba, el Girona ha introducido la pelota en su portería, pero el gol ha sido anulado, porque había muchos rojiblancos en fuera de juego. Así las cosas, el Girona ha efectuado el retorno a la Liga con un buen punto, cerrando así un 2022 histórico: el año del segundo ascenso a Primera.
