El París Saint-Germain (PSG) ha estado a solo un paso de convertirse nuevamente en el hazmerreír de Europa. Este equipo, formado a golpe de talonario, tiene como objetivo ganar la UEFA Champions League desde que hace muchos años llegó la gran inyección de petrodólares, pero no solo no lo ha conseguido nunca, sino que en muchas ocasiones ha hecho el ridículo y ha sufrido derrotas y remontadas en contra muy sonadas, como la del Futbol Club Barcelona en 2017 o la del Real Madrid en 2022. En los cuartos de final de la Champions de este año, el Aston Villa ha estado a punto de lograr la misma hazaña.
El Aston Villa se queda a un paso de una nueva remontada histórica contra el PSG
En el partido de ida en el Parque de los Príncipes, el PSG de los exblaugranas Luis Enrique y Ousmane Dembélé dejó la eliminatoria encarrilada con un 3-1. En la vuelta, los franceses se adelantaron por 0-2 en el Villa Park de Birmingham, lo que dejó el pase de los parisinos a las semifinales casi sentenciado. El Aston Villa necesitaba hasta cuatro goles para igualar la eliminatoria, pero estuvieron a punto de lograrlo. Los ingleses recortaron distancias antes del descanso y, justo al comenzar la segunda mitad, marcaron dos goles seguidos que dejaron la remontada al alcance con un 3-2. Durante media hora, el Aston Villa tuvo muchísimas ocasiones para marcar el gol del empate, que habría llevado el partido a la prórroga, ante un PSG absolutamente deshecho. Finalmente, sin embargo, el tanto no llegó y los franceses pasaron a semifinales.

Ahora, el PSG espera rival en la penúltima ronda de la Champions. El contrincante de los parisinos saldrá de la eliminatoria entre el Real Madrid y el Arsenal, que los ingleses dominan con claridad gracias al 3-0 de la ida. Ahora bien, el conjunto merengue es capaz de cualquier cosa en la Liga de Campeones, así que no se puede dar nada por hecho. Sea como sea, serán unas semifinales muy disputadas. El PSG ha hecho grandes partidos en la Champions y es uno de los mejores equipos de Europa, pero ha quedado claro que también tiene puntos débiles y que el gran objetivo de levantar la orejona seguirá siendo muy complicado de alcanzar.