El fútbol argentino está de luto por la muerte de Daniel Ibáñez, portero del Atlético Tucumán, que estaba cedido en Chacaritas, de la segunda división ecuatoriana. El joven futbolista de 25 años ha fallecido a causa de una embolia pulmonar después de haber empezado a sentir dolores en el pecho. Todo ello, después del entrenamiento del pasado domingo, cuando empezó a notar el dolor y fue trasladado a un centro hospitalario, donde, trágicamente, perdió la vida. Un Atlético Tucumán que, desgraciadamente, ya se ha tenido que enfrentar a un trágico desenlace como este en cuatro ocasiones durante el último año y medio, puesto que desde junio del 2022 ha comunicado en sus redes sociales cuatro muertes de futbolistas de su entidad.
La noticia del fallecimiento de Daniel Ibáñez ha provocado una gran tristeza en la comunidad futbolística argentina. El club y otras organizaciones relacionadas con el fútbol han expresado sus condolencias y apoyo a la familia del futbolista y a sus compañeros. Las autoridades deportivas también han tomado medidas, como la suspensión de los partidos como muestra de respeto y pésame por esta trágica pérdida.
Cuatro muertes desde junio del 2022
Esta se trata de la cuarta muerte que sacude a Atlético Tucumán en un corto periodo de un año y medio. La primera fue en marzo del 2022, cuando Jonathan Alderetes, de 19 años, falleció en un accidente automovilístico. Solo tres meses después, fue el jugador de la cantera Fabricio Navarro, de 21 años, quien murió a causa de un infarto. Más adelante, en noviembre, llegó el tercer infortunio con la muerte del colombiano Andrés Balanta, de 22 años, que perdió la vida después de desmayarse en un entrenamiento y no conseguir ser reanimado por los médicos.
Evidentemente, es realmente preocupante que este sea el cuarto caso de muerte de un futbolista de una misma entidad en tan solo un año y medio. La seguridad y la salud de los deportistas han sido puestas bajo la lupa, puesto que tres de estos casos fueron a causa de problemas de salud, como un infarto o una embolia pulmonar. Unas muertes muy seguidas que han generado inquietud y reflexión en el mundo del fútbol argentino sobre como preservar la integridad y el bienestar de los jugadores.