Hasta el momento se ha hablado muchísimo del caso de las actitudes machistas de Luis Rubiales durante la final del Mundial femenino de Australia y Nueva Zelanda, pero todavía no ha habido ninguna consecuencia o repercusión para el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Este viernes, sin embargo, hay convocada una asamblea extraordinaria de urgencia de la RFEF donde se espera que se tomen algunas decisiones. En un primer momento, Rubiales no contemplaba la dimisión, ni ninguna cosa que se le pudiera asemejar. Sin embargo, después de todo el follón generado y el comunicado de Jenni Hermoso, quien recibió su beso en la boca a la fuerza, donde pedía medidas contra él, podría haber cambios en el desarrollo de la asamblea en cuestión.
Rubiales prepara una estrategia para la asamblea de la RFEF
Lo primero que sorprende, sin embargo, es que en el orden del día de la asamblea no hay ningún punto para debatir el futuro de Rubiales. Esto ya indica que el presidente de la RFEF no tiene prevista ninguna medida drástica. De hecho, en un primer momento esta reunión tenía que ser para cerrar filas con él. Ahora, por eso, viendo que puede ser inhabilitado por el Consejo Superior de Deportes del gobierno español e incluso cesado de forma permanente por el Tribunal Superior del Deporte, Rubiales prepara una estrategia de contingencia que ha transcendido a los medios de comunicación. Su idea sería salir inhabilitado de esta asamblea, pero solo de forma momentánea, entre unos dos y seis meses, aproximadamente. Esto lo sacaría de la esfera pública durante un tiempo, pero podría volverse a presentar en las próximas elecciones de la RFEF, que se celebrarán en 2024.

Tres ausencias muy destacadas confirmadas
En esta asamblea de la RFEF, formada por unos 140 miembros, de los cuales solo seis son mujeres, habrá algunas ausencias destacadas. En primer lugar, el Fútbol Club Barcelona ha hecho saber a la prensa que Joan Laporta, presidente de la entidad y miembro de la asamblea, no asistirá por motivos de agenda. Ángel Torres, presidente del Getafe, también es miembro de la asamblea y ya ha anunciado que no irá como protesta contra la actitud de Rubiales. Lo más destacado, sin embargo, es el papel de la Federación Vasca de Fútbol, que ha advertido que tampoco enviará ningún representante, puesto que está en contra del comportamiento de Rubiales. Esto indica que se espera que sea una asamblea plácida para el presidente de la RFEF, donde su objetivo es salir beneficiado.