Ansu Fati, delantero del Fútbol Club Barcelona, ha demostrado que habla el catalán de forma casi perfecta en una entrevista con Esport3. Hasta ahora, el joven futbolista nacido en Guinea-Bissau en 2002 había respondido a alguna pregunta en rueda de prensa en catalán o había hecho alguna promoción del club en esta lengua, pero nunca se le había podido oir durante tanto rato. Esta entrevista ha durado unos quince minutos y no ha tenido casi ningún problema a la hora de expresarse en catalán. Él llegó a Cataluña en 2012 y ha aprendido la lengua del país, cosa que no tendría que ser una excepción, pero hay el ejemplo de varios jugadores que, a pesar de haber pasado muchos años en la Masía del Barça, no han dicho casi ninguna palabra en catalán públicamente.
Ansu Fati asegura que está recuperado
Más allá de esto, lo que más ha destacado de esta entrevista han sido sus declaraciones sobre su estado físico. Ha asegurado que todavía no está al 100%, pero «me falta muy poco». A la vez, ha dicho que ya no juega los partidos con miedo de recaer, cosa que sí que le había pasado justo después de recuperarse. Además, también ha tenido que hablar sobre las dificultades psicológicas a la hora de afrontar una lesión como la que ha tenido, pero Ansu ha dejado muy claro que en ningún momento ha querido tirar la toalla: «Nunca he pensado en dejarlo. Son cosas que pueden pasar en el mundo del fútbol y yo he vivido cosas mucho peores».
El delantero guineano bendice el retorno de Messi
Por otro lado, Ansu también ha hablado de uno de los temas del momento, el presunto interés del Barça para recuperar a Leo Messi el próximo verano, cuando finalice su contrato con el París Saint-Germain. El delantero guineano no ha tenido ninguna duda a la hora de bendecir un posible retorno del astro argentino. Ha dicho que es «el mejor jugador de la historia del club» y que, por lo tanto, tiene que tener «una despedida como Dios manda». Hay que recordar que Ansu Fati y Leo Messi compartieron vestuario entre 2019 y 2021 y, de hecho, el joven futbolista ha heredado el mítico dorsal 10 del argentino.