Xavi Hernández, técnico del Fútbol Club Barcelona, ha comparecido en rueda de prensa antes del partido contra el Rayo Vallecano de este sábado, correspondiente a la decimocuarta jornada de Liga. Ante los medios, el técnico azulgrana ha sido preguntado sobre varios temas que ocupan las portadas de la actualidad azulgrana. Uno de ellos, el de la polémica entre Lewandowski y Lamine Yamal. El delantero polaco fue realmente criticado por su actitud con el joven extremo de Mataró a causa de un gesto de desprecio hacia el joven azulgrana que dio la vuelta al mundo. Xavi, siendo preguntado al respecto, ha decidido enterrar la polémica.
Para cerrar las especulaciones, el técnico azulgrana ha decidido recurrir a la hemeroteca: “Es algo normal, a mí me ha pasado mucho cuando era jugador. Broncas con Puyol, con Valdés… Recuerdo una bronca con Valdés en Almería. También con Villa, con Pedro, con Messi…” Y ha añadido: “Pasa en todas partes, a los trabajos, pero no le damos importancia”, ha dicho Xavi, quitando importancia a la anécdota sucedida durante el Barça-Alabès.
Destaca el importante papel de Lewandowski con los jóvenes
De hecho, Xavi no solo ha apartado la polémica, sino que ha querido defender el papel de líder de Lewandowski dentro del equipo, destacando su contribución decisiva en el último enfrentamiento contra el Alavés, donde marcó dos goles, incluyendo un espectacular cabezazo que aseguró la remontada del Barça. “Lewandowski es de los futbolistas que más ayuda al compañero y Robert está muy pendiente de Lamine para que sea un gran futbolista”, ha sentenciado. Así pues, el técnico egarense ha desdramatizado la situación, normalizando el episodio como parte inherente del mundo del fútbol y reiterando la importancia de Lewandowski para el equipo. “Es un líder en el vestuario, altruista y fundamental para nosotros”, ha concluido.
Las imágenes de tensión entre Robert Lewandowski y Lamine Yamal fueron altamente comentadas. Sin embargo, Xavi enterró la polémica, al igual que lo hicieron los protagonistas de la acción. De hecho, Lewandowski explicó la situación nada más llegar a la concentración de la selección polaca, confirmando que solamente fue una “coincidencia” y calificándolo de una “acción normal en el campo entre dos jugadores” y asegurando que no hay ningún problema entre ambos futbolistas. Un gesto, el del polaco, que tampoco tuvo importancia alguna para el joven Lamine: “Él mismo ya lo ha dicho, son cosas que pueden pasar sobre el césped. Es un compañero más, me llevo muy bien y no tengo ningún problema con él. En el vestuario todos estamos muy bien y muy contentos”.
