El partido contra la Real Sociedad ha sido el último de Luka Modrić y Carlo Ancelotti en el Santiago Bernabéu. El centrocampista croata y el entrenador italiano no continuarán en el Real Madrid y han aprovechado la ocasión para despedirse de la afición madridista, la cual los ha recibido con un ‘tifo’ para cada uno: Gracias leyenda (Modrić) y Gracias Carletto (Ancelotti).
GRACIAS, LEYENDA 🤍
— DAZN España (@DAZN_ES) May 24, 2025
GRACIAS, CARLETTO ✨
El tifo del Santiago Bernabéu para despedir a Modric y Ancelotti 🤩 El Real Madrid dice adiós a dos de sus figuras más importantes #LALIGAenDAZN ⚽ pic.twitter.com/XR5gOdFlp3
«No llores porque termina, sonríe porque sucedió»
Aunque la previa y el partido han sido un homenaje en sí mismos, el momento más especial y emocionante ha llegado en cuanto el árbitro ha pitado el final. Las luces del Bernabéu se han atenuado para dar paso a dos vídeos: uno dedicado a Carlo Ancelotti y otro para Luka Modrić. Los protagonistas tomaron entonces el micrófono y desde el centro del campo se dirigieron a su afición. El técnico italiano, visiblemente emocionado y con su elegancia habitual, agradeció el afecto incondicional de los madridistas y hizo llorar a Florentino Pérez con un sentido discurso en el que comentó los mejores momentos de una «historia inolvidable».
🤍 @MrAncelotti 🤍
— Real Madrid C.F. (@realmadrid) May 24, 2025
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Por otro lado, si las emociones ya estaban a flor de piel con el discurso de Ancelotti, Modrić terminó de romper el corazón de todos con el suyo. «Ha llegado el momento que nunca quise que llegara, pero ha sido un viaje largo y maravilloso», comenzó diciendo el croata, que después de agradecer al club y a la afición, se despidió con la siguiente frase: «No llores porque termina, sonríe porque sucedió».
🥹 @LukaModric10 🥹
— Real Madrid C.F. (@realmadrid) May 24, 2025
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Finalmente, el colofón a las ceremonias de reconocimiento llegó con la vuelta de honor. Modrić y Ancelotti recorrieron el Bernabéu entre aplausos ensordecedores y terminaron siendo manteados por toda la plantilla blanca antes de enfilar el túnel de vestuarios por última vez. Un homenaje a la altura y que salda una deuda que tenía el Real Madrid a la hora de despedir a sus leyendas.
