El Comité de Disciplina de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha resuelto que Vinicius Jr., delantero brasileño del Real Madrid, será castigado con solo dos partidos de suspensión tras su empujón en la cara a Stole Dimitrievski, portero del Valencia. Esto supone la sanción más baja posible, ya que la RFEF ha considerado que no hubo agresión de Vinicius al jugador macedonio y ha considerado que esta acción del delantero brasileño solo fue «leve». El Comité de Disciplina se ha amparado en el acta del árbitro César Soto Grado, quien fue el que expulsó a Vinicius, pero no hizo constar en su informe posterior al partido que el balón no estaba en juego y esto ha permitido que la sanción no escale hasta los cuatro o doce partidos que conllevaría una agresión.
Vinicius, dos partidos de sanción por su espectáculo en Valencia
Dado que no se trata de un caso grave, Vinicius deberá cumplir los partidos de sanción en la misma competición en la que tuvo lugar la expulsión, es decir, en la Liga. Por lo tanto, el delantero brasileño podrá disputar la Supercopa con el Madrid y solo se perderá los encuentros contra el Las Palmas y el Valladolid. El calendario ha sido caprichoso y ha querido que ninguno de estos dos enfrentamientos sea un reto especialmente duro para el conjunto merengue, ya que son dos equipos de la parte baja de la clasificación, que tienen como objetivo luchar por la permanencia.
Esta resolución de la RFEF ya ha levantado mucho polvo, especialmente en cuanto a críticas del barcelonismo, que ven cómo Vinicius recibe la sanción más baja posible por un golpe en la cara de un rival -y los insultos y faltas de respeto posteriores que Soto Grado tampoco tuvo en cuenta-, mientras que el blaugrana Robert Lewandowski se perdió tres partidos hace dos temporadas por hacer un gesto tocándose la nariz.
