Baño y masaje del Arsenal al Real Madrid. El conjunto inglés ha destrozado al combinado blanco en la ida de los cuartos de final de la UEFA Champions League y ha puesto un pie en las semifinales de la máxima competición continental (3-0). Tras una primera parte sin goles y con ocasiones para ambos equipos, la segunda mitad ha sido una auténtica exhibición de los londinenses. Dos goles antológicos de falta de Declan Rice, que sin duda darán la vuelta al mundo, han puesto por delante al Arsenal, con un Madrid incapaz de crear peligro en la otra portería. Para rematarlo, Mikel Merino ha marcado el tercero para hacer estallar la euforia en el Emirates Stadium. No obstante, teniendo en cuenta que la vuelta será en el Santiago Bernabéu y el historial de los madrileños en la Liga de Campeones en las últimas décadas, algunos aún no lo dan por sentenciado, pero el Madrid ha acabado herido de muerte.
La crónica del Arsenal 3-0 Real Madrid
La ida de los cuartos de final entre ingleses y madrileños ha comenzado muy intensa, con un intercambio de golpes en ambas porterías. Asimismo, ha sido el Arsenal quien ha tenido el control del balón y se ha acercado más a los palos de Thibaut Courtois, ya recuperado de sus problemas físicos y habiendo vuelto a la titularidad. Aun así, algunos errores en la salida del esférico de los londinenses han provocado varios sustos de los blancos. Con el paso de los minutos, el Madrid ha comenzado a dominar más y ha buscado de manera constante a Kylian Mbappé, el jugador más peligroso del conjunto de Carlo Ancelotti en ataque. De hecho, el francés ha tenido la primera gran oportunidad del partido cuando se plantó solo ante David Raya, pero el portero del Arsenal se hizo gigante y detuvo el intento del delantero. En el otro lado del campo, el extremo Bukayo Saka ha sido la gran amenaza de los ingleses, poniendo el corazón en un puño a los defensas del combinado madrileño. Al final de la primera parte, Courtois volvió a convertirse en el salvador del Madrid con dos paradas espectaculares.
En la reanudación, los blancos tuvieron la primera de la segunda mitad a partir de las botas de Mbappé, que volvió a tenerla, pero su disparo chocó con el lateral de la red de la portería del Arsenal. No obstante, los ingleses no se echaron atrás y continuaron atacando… Hasta que apareció Declan Rice. El centrocampista, en un intervalo de 10 minutos, hizo enloquecer el Emirates Stadium con dos goles de falta antológicos que Courtois, el héroe del Madrid, no pudo hacer nada en ninguno de los dos disparos memorables. En el primero, una rosca perfecta e imposible de detener para el belga, mientras que en el segundo, colocó el balón directamente en la escuadra con un maestría al alcance de muy pocos.

El conjunto madrileño quedó totalmente hundido con las dos maravillas del futbolista inglés y eso lo aprovechó el Arsenal para echar más sal en la herida. Un disparo imperial de Mikel Merino desde la frontal colocó el tercer gol en el marcador de un combinado, el de Mikel Arteta, insaciable y con ganas de hacer más daño para evitar una nueva hazaña del Madrid en la vuelta, como suele ser habitual. Aunque el electrónico de la ida no se movió más, los londinenses terminaron el partido gustándose con el balón y con los aficionados rendidos a sus pies tras una segunda parte memorable. Además, los madrileños vieron cómo Eduardo Camavinga se autoexpulsó con una acción muy absurda.