El Real Club Deportivo Espanyol disputa este sábado el partido más importante de la temporada. Es el duelo correspondiente a la última jornada de Liga, contra el Las Palmas en el RCDE Stadium a las 18:30h. El conjunto perico se lo juega todo: una victoria confirmaría su permanencia en la Primera División, pero con un empate o una derrota las cosas cambian. El Espanyol tiene que hacer los deberes, y además lo tiene todo de cara, ya que juega contra un rival que hace días que es matemáticamente equipo de la Segunda División.
Ahora bien, seguro que muchos pericos también tendrán un ojo en Leganés, donde el conjunto madrileño también se lo estará jugando todo, a la misma hora, contra el Valladolid, un rival que hace aún más tiempo que está descendido. Si los pericos pierden o empatan y el Leganés gana, el Espanyol bajará a Segunda. Ahora bien, si los madrileños fallan, los catalanes se salvan pase lo que pase. Por lo tanto, los blanquiazules aún tendrán una bala si no son capaces de ganar, pero siempre es mejor no tentar la suerte.
El Espanyol, obligado a ganar si no quiere mirar qué pasa en Leganés
El Espanyol tiene argumentos de sobra para creer en la permanencia. Ha hecho una segunda vuelta descomunal, con un Manolo González que ha sido capaz de extraer todo el potencial de una de las peores plantillas de la categoría. Además, juega en casa, en el RCDE Stadium, con el apoyo del público local que llenará el campo hasta la bandera. Para colmo, el Las Palmas no debería hacer grandes esfuerzos, ya que es un equipo que sabe desde hace días que no puede hacer nada para salvar la categoría. Ahora bien, los pericos también tienen motivos para sufrir.
El Espanyol llega en una dinámica nefasta de cinco derrotas consecutivas. De hecho, todo el mundo daba por salvados a los blanquiazules hace un mes, pero el conjunto perico ha sido incapaz de sumar los tres puntos definitivos que necesitaba para estar tranquilo del todo y ha llegado a la última jornada de Liga con el agua al cuello. El Espanyol, por tanto, ha dejado escapar muchas oportunidades de sentenciar la permanencia, si bien tampoco ha tenido el calendario más sencillo, así que ahora tiene que dejar de perdonar y ganar un partido que sí es asequible.
El riesgo de convertirse en un equipo ascensor
Aunque el descenso es el escenario menos probable, los jugadores del Espanyol harían bien en ser conscientes de la importancia de este partido. Hay muchos jugadores formados en las categorías inferiores del club y otros que llevan años en el RCDE Stadium. Por lo tanto, estos deberían saber -y contagiar a los compañeros- que el Espanyol no puede permitirse un nuevo descenso. En su historia, el club perico solo ha disputado seis temporadas en la Segunda División, pero dos de ellas han sido en los últimos cinco años. El equipo blanquiazul debe estar en Primera, porque esa es su naturaleza, así que un nuevo descenso haría mucho daño al club y a la afición. Además, habría el riesgo de convertirse en un equipo ascensor, que sumaría tres descensos en muy poco tiempo. El Espanyol, después de un mes nefasto, está obligado a hacer los deberes.
