El Real Club Deportiu Espanyol ha empezado la campaña 2023-2024 en la Segunda División de mala manera. A pesar de que Fernando Pacheco, portero perico, hizo un partidazo contra el Albacete, los blanquiazules, que se habían avanzado en la primera parte, acabaron concediendo el empate a los castellanos de la forma más amarga posible: con un gol en el tiempo añadido. Además, el equipo dejó una mala imagen en líneas generales en la segunda mitad. Si bien se espera que el Espanyol sea uno de los grandes equipos de la Segunda División y pueda volver rápidamente a Primera, el nivel mostrado por los futbolistas en la segunda parte fue el de un conjunto cansado, cosa que comportó falta de ideas y de capacidad de mantener o incluso ampliar la victoria.
Fran Garagarza, protagonista negativo del primer partido del Espanyol en Segunda División
En medio de esta situación, Fran Garagarza, que recientemente ha sido fichado por el Espanyol como director deportivo del club, se convirtió en protagonista. En primer lugar, el vasco quiso tener su minuto de gloria con la afición y se dirigió a los pericos desplazados a Albacete al final del duelo para pedirles calma y paciencia. Los seguidores del Espanyol y desde el club en general están con la mosca detrás la oreja por el hecho de que Garagarza todavía no ha incorporado a ningún futbolista y, en cambio, ha vendido a jugadores muy importantes como Joselu Mato o, sobre todo, Sergi Darder.

Los hechos más graves, sin embargo, ocurrieron dentro del vestuario del Espanyol, según ha revelado La Grada. Garagarza rompió una norma no escrita y entró al finalizar el partido. Además, una vez dentro, recriminó a los futbolistas la actitud que habían tenido durante el duelo, que reaccionaron incómodos y enfadados, hasta el punto de que el entrenador, Luis García, se enfrentó a Garagarza y le hizo salir del vestuario. Situación, pues, muy desagradable en el Espanyol, que, eso sí, parece que pronto podría empezar a perdonar a su director deportivo, porque está a punto de fichar al delantero del Elche Pere Milla.