Tadej Pogacar ha culminado su tercero Tour de Francia con una exhibición magistral a la contrarreloj final, celebrada entre Mónaco y Niza. En una etapa de 33,7 kilómetros, el esloveno ha demostrado un dominio agobiante, superando Jonas Vingegaard y Remco Evenepoel, segundo y tercero a la clasificación general, respectivamente. Esta 111.ª edición del Tour ha sido la primera que no ha finalizado a París, dando en la Costa Azul un escenario de lujo para la conclusión de la gran prueba ciclista.
Desde la salida en Mónaco, Pogacar empezó marcando los mejores tiempos en cada uno de los puntos intermedios. La Túrbia, el Coll de Esa y la Plaza de la Île de Beauté fueron testigos de su dominio. Con esta victoria, la esloveno suma seis etapas en esta edición y ya en puerta 18 en sus cinco participaciones en el Tour, tres de las cuales ha ganado.
La contrarreloj tuvo momentos destacados con otros ciclistas también haciendo grandes actuaciones. Derek Gee, por ejemplo, hizo un tiempo de 47:55, superando el francés Lenny Martinez por 18 segundos. El canadiense mejoró notablemente en los parciales, especialmente en el segundo, donde dobló Giulio Ciccone.
Mark Cavendish, a pesar de acabar último en esta etapa, fue uno de los grandes protagonistas del Tour. El británico desempató con Eddy Merckx en número de victorias de etapa, llegando a las 35. A pesar de sus dificultades, Cavendish demostró una vez más su tenacidad y experiencia.
La actuación de Pogacar fue especialmente notable en el último parcial, donde marcó un tiempo de 39:28, dejando atrás Vingegaard y Evenepoel. Finalmente, cruzó la línea de llegada con un tiempo de 45:24, celebrando con su equipo vestido de amarillo y con la sonrisa que lo caracteriza.
En esta edición, también hay que destacar el desempeño histórico de Biniam Girmay, quien se convirtió en el primer ciclista africano a ganar el maillot verde de la regularidad. El eritreo ganó tres etapas y fue una de las grandes revelaciones del Tour.
