El banquillo del primer equipo masculino de fútbol no es la única que será sujeto de cambios al Fútbol Club Barcelona. En las secciones del club, después del turno del fútbol sala, ha llegado la confirmación del final de ciclo al hockey patines. El Barça ha confirmado este jueves que Edu Castro dejará de ser el entrenador azulgrana desprendido de diecinueve años vinculado al primer equipo, siete como técnico del conjunto culé, puesto que no le renueva el contrato. Durante este tiempo, Castro ha conseguido un total de veintidós títulos y será una de las salidas más importantes del grupo, puesto que no es la única figura de peso que marchará.
Edu Castro es una figura veterana al Barça de hockey patines. La entidad culé ha querido destacar «la profesionalidad, el compromiso, la dedicación y el trato siempre positivo y próximo que han mostrado a todos los estamentos». Antes de hacer el salto como primer entrenador del primer equipo la temporada 2017-2018, fue ayudante. Durante su etapa como técnico, los azulgranas han ganado cinco Ligas, una Copa Continental, dos Copas Intercontinentales, cinco Copas, cuatro Supercopas y cuatro Ligas Catalanas. El título más destacado, pero, es la Champions del 2018. Castro todavía tiene la posibilidad de despedirse con una Liga más, pero no con una Copa de Europa adicional después de ser eliminado por el Sporting de Portugal en el Palau Blaugrana, quedándose sin la final a cuatro.
Portugal, el posible destino de Edu Castro
Más allá de la salida de Edu Castro, quien también marchará del Barça es su ayudante, Jordi Roca. El club azulgrana ha confirmado que no revelará quién será el nuevo entrenador hasta el final de la temporada. El hispitalense todavía no ha confirmado su próximo destino, pero los rumores apuntan al hecho que desde el próximo curso formará parte del Benfica portugués. El técnico no marcharía sol a Lisboa, puesto que también contaría con la presencia del considerado mejor jugador del mundo, Pau Bargalló, y Joao Rodrigues, que también han confirmado su salida del club azulgrana. Bargalló jugaría por primera vez a su carrera fuera del estado español y Rodrigues volvería a las águilas seis años después, porque llegó a la entidad culé el mismo año que Castro empezó a dirigir el primer equipo.
