El Girona se ha quedado con la miel en los labios ante el Oviedo después de un partido totalmente loco en Montilivi. El conjunto de Míchel Sánchez, que ha remontado un 0-2 en contra con un doblete de Cristhian Stuani y un gol de Ounahi, ha visto cómo en el tiempo añadido se le escapaba la victoria debido a un gol ‘in-extremis’ de David Carmo.
La crónica del Girona – Oviedo (3-3)
Es la jornada 10 sí, pero el partido era toda una final anticipada para Girona y Oviedo que llegaban a la cita en posición de descenso y habiendo sumado solo 6 puntos de 27 posibles. Tras unos minutos de tanteo por parte de ambos conjuntos, los de Míchel Sánchez han comenzado a generar un poco de peligro por la banda izquierda, mediante un Joel Roca que ha encontrado las grietas en la defensa del Oviedo. El extremo catalán estuvo a punto de marcar tras una excelente jugada individual, pero Aarón Escandell evitó el gol gerundense con una gran intervención.
El JUGADÓN de Joel Roca y el PARADÓN de Aaron Escandell 🤯🔥
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A pesar de la advertencia de Joel Roca, el Oviedo no sufría en exceso y con el paso de los minutos, cada vez estaba más cómodo sobre el terreno de juego. Gracias a la pelota parada, los asturianos disfrutaron de su primera ocasión. En el 28, Fede Viñas remató un córner servido por Colombatto y Gazzaniga, con una mano espléndida, le negó el gol. Cinco minutos más tarde, los mismos protagonistas volvieron a entrar en acción y el resultado fue el mismo, pero esta vez, el árbitro, tras ser advertido por el VAR, acabó señalando un penalti muy inocente de Àlex Moreno, que desvió con la mano el remate del delantero uruguayo del Oviedo. El mismo Fede Viñas se encargó de transformarlo y hacer el 0-1, con el cual se llegaría al descanso.
El VAR indica penalti a favor del Real Oviedo por mano de Àlex Moreno 📺
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Tras el paso por vestuarios, el Girona no solo continuaba sin generar peligro, sino que vio cómo el partido se le complicaba aún más en el minuto 58, cuando Rondón hizo el 0-2 al rematar completamente solo en el primer palo un nuevo córner servido por Colombatto. La reacción no se hizo esperar y Míchel movió ficha inmediatamente: Stuani, Ounahi y Hugo Rincón entraron por Vanat, Tsygankov y Blind. Los cambios le dieron un aire completamente diferente al Girona, en especial el de Stuani. El uruguayo, en su primera intervención, estuvo a punto de marcar, pero Aarón Escandell, con una parada milagrosa sobre la línea de gol, volvió a salvar a los suyos. Sin embargo, el 1-2 no tardaría en llegar. En el 63, Stuani provocó un penalti, que el árbitro señaló tras ver la jugada en el VAR, y él mismo lo transformó engañando a Escandell.

Míchel puso más leña al fuego dando entrada a Portu y Lemar, y el Girona se volcó en ataque. La insistencia tuvo premio y además, por partida doble. Ounahi hizo el empate con un gran tiro desde la frontal y en el 88, el marroquí sacó de la manga un penalti que Stuani transformó para firmar su doblete y certificar la remontada, momentánea, del Girona. Y es que, en el tiempo añadido y cuando todo indicaba que los tres puntos se quedarían en Montilivi, David Carmo hizo el definitivo 3-3.
