El fútbol está a punto de vivir un cambio radical en sus reglas con la introducción de su tarjeta azul. Tal y como ha informado The Telegraph, la International Football Association Board (IFAB), el órgano rector encargado de dictar las normas del fútbol, planea presentar esta idea como nueva herramienta para afrontar situaciones como faltas tácticas o protestas excesivas. En caso de recibir una tarjeta de color azul, el jugador será expulsado del campo durante 10 minutos, ofreciendo al equipo rival una oportunidad de ventaja numérica.
Aunque este cambio no afectaría inmediatamente a las competiciones de primer nivel, como la Champions, la Federación Inglesa de Fútbol se ha ofrecido voluntaria para probar esta nueva medida en la FA Cup masculina y femenina, las copas inglesas, a partir de este verano. En caso de aplicarse en Inglaterra, iniciaría el ensayo de esta aportación innovadora y que podría marcar un precedente para otras competiciones de prestigio internacional. En todo caso, se trata de una sanción similar a la que ya existe en el fútbol sala.
¿Para qué sirve y cuándo se utilizará?
Este jueves hemos conocido, según avanzó The Telegraph, que la IFAB se plantea introducir esta nueva sanción. Una norma que nace con el fin de limitar el número de protestas que reciben los árbitros durante el desarrollo de los partidos. Así, los jugadores que la reciban serán expulsados durante 10 minutos. Una medida innovadora que, en principio, se anunciará este viernes y que está destinada a transformar la dinámica del juego y promover un comportamiento más disciplinado por parte de los jugadores. Además, también para promover partidos más emocionados por encontrar más espacios al jugar con menos jugadores.
Una característica clave de esta nueva disposición es su graduación: dos tarjetas azules equivaldrían a una tarjeta roja, que implicará la expulsión definitiva del jugador del partido y una suspensión automática para el siguiente en caso necesario. Asimismo, una combinación de tarjeta azul y amarilla provocarían también una expulsión del mismo tipo.
