El Manchester City ha conseguido un triunfo imprescindible este sábado en el Etihad Stadium, superando al Chelsea por 3-1 en un duelo vibrante que ha servido para recuperar posiciones en la Premier League y situarse en puestos de Champions. Con una actuación destacada de Erling Haaland, autor de un gol y una asistencia, y de Phil Foden, los de Pep Guardiola han demostrado que pueden rendir bajo presión, a pocos días de un decisivo partido contra el Club Bruges en la máxima competición europea.
El duelo ha comenzado con tensión, especialmente para el debutante uzbeko Abdukodir Khusanov, que ha tenido un inicio complicado. Solo en el minuto 3, un error en una cesión suya ha permitido que el Chelsea se adelantara en el marcador con un gol de Noni Madueke tras la asistencia de Nico Jackson. El nerviosismo del central, el primer uzbeko de la historia de la Premier, ha sido evidente, pero Guardiola ha decidido mantenerlo en el partido hasta bien entrada la segunda parte.
Un triunfo balsámico de los de Guardiola antes de la Champions

El City ha reaccionado gracias a su juego directo. En el minuto 42, un desplazamiento largo de Ilkay Gündogan ha sido decisivo: tras varias acciones dentro del área, el croata Josko Gvardiol ha empatado a puerta vacía. Este gol ha marcado un punto de inflexión para los locales, que han mostrado una versión más consistente a partir de ese momento.
El Manchester City ha seguido insistiendo en la segunda mitad, con un Chelsea incapaz de mantener el ritmo. En el minuto 68, una genialidad de Haaland, aprovechando un servicio largo de Ederson, ha desequilibrado el partido. El atacante noruego ha marcado su 18º gol en la Premier, demostrando una vez más por qué es uno de los máximos goleadores del torneo.
Cuando el partido parecía casi sentenciado, Phil Foden ha aprovechado otra acción colectiva liderada por Haaland para sellar el 3-1 final en el minuto 87. El inglés, en plena forma, ha marcado en cuatro jornadas consecutivas, enviando un mensaje de optimismo a los aficionados citizens de cara a la recta final de la temporada.
Este resultado deja al Chelsea en sexta posición, acumulando una preocupante serie de una sola victoria en siete jornadas. Los de Maresca no han sabido gestionar sus oportunidades y han pagado caro su desconcierto defensivo.
El Manchester City, por su parte, se mantiene en la lucha por los puestos cabeceros de la Premier, a pesar de sus fragilidades. Con el duelo decisivo de Champions en el horizonte, Guardiola tendrá que trabajar para encontrar un equilibrio que garantice continuidad y solidez.