El Manchester City ha vivido una noche para olvidar en el Emirates Stadium, donde fue goleado por un Arsenal que no dio ninguna opción a los de Pep Guardiola. Los ‘gunners’ se impusieron por un contundente 5-1, aprovechando los graves errores defensivos del conjunto ‘citizen’. Esta derrota deja al City a 15 puntos del Liverpool, mientras que el Arsenal se sitúa a seis del liderato, aunque con un partido más.
El duelo comenzó con el conjunto de Guardiola incapaz de controlar el juego. Solo habían pasado dos minutos cuando Odegaard aprovechó una grave pérdida de Akanji para inaugurar el marcador. Un gol que condicionó por completo el partido. El City intentó reaccionar con una ocasión clara de Gvardiol, que se topó con el travesaño, pero su falta de contundencia pasó factura. Los de Mikel Arteta supieron jugar con el marcador a favor y llevaron al límite a un City desesperado.

En la reanudación, el conjunto visitante parecía que podía despertar con el gol de Haaland en el minuto 52, fruto de un centro milimétrico de Savinho. Pero la alegría ‘citizen’ duró solo dos minutos, ya que un nuevo error en la salida de balón, esta vez de Foden, permitió a Thomas Partey marcar el 2-1 con un disparo que tocó en Stones antes de entrar.
A partir de aquí, el Manchester City se desinfló por completo. Con una defensa desajustada y sin capacidad de reacción, el Arsenal pasó por encima del vigente campeón de Europa. Los goles de Lewis-Skelly, Havertz y Nwaneri terminaron de redondear la humillación para los de Guardiola, que encajaron una ‘manita’ dolorosa en un momento clave de la temporada.
Este resultado deja muchas incógnitas sobre el futuro del Manchester City, que ya no parece candidato al título e incluso ve peligrar su posición en la zona Champions. Con el Liverpool y el Real Madrid en el horizonte, Guardiola debe activar todas las alarmas para evitar que la temporada acabe convirtiéndose en un auténtico fracaso.