Wissam Ben Yedder ha sido acusado de un delito de agresión sexual junto con otra persona, aparentemente su hermano pequeño, en relación con unos hechos ocurridos esta misma semana en Beausoleil, una pequeña localidad francesa cerca del Principado de Mónaco, en la Costa Azul. Según informaciones de la prensa, las acusaciones provienen de dos chicas, de 19 y 20 años, que aseguran haber sido víctimas de agresiones sexuales por parte del futbolista francés de 32 años y de su hermano, después de una noche de fiesta en Beausoleil.
El jugador, que anteriormente había estado en el Sevilla entre 2016 y 2019, juega actualmente en el Mónaco, club que ha optado por no hacer ningún comentario sobre el asunto, puesto que se encuentra bajo proceso judicial. Los hechos en cuestión tuvieron lugar la madrugada del 10 de julio y ahora se encuentra bajo investigación por parte de las autoridades francesas. Cabe recordar que Ben Yedder ya había tenido problemas legales anteriormente, siendo condenado por la justicia española a seis meses de cárcel exentos de cumplimiento y una multa por fraude fiscal, a pesar de que esta situación es diferente a las actuales acusaciones de delito sexual.

Se suma a Gonzalo Montiel i Dani Alves
Si Dani Alves, futbolista del Sevilla entre 2003 y 2008, y Wissam Ben Yedder, entre 2016 y 2019, están siendo investigados por una agresión sexual, pasa lo mismo con un jugador de la actual plantilla del conjunto andaluz. Se trata del argentino Gonzalo Montiel. El jugador del Sevilla y de la selección argentina, está imputado por un delito de abusos sexuales después de declarar haber declarado en Argentina. El reciente campeón del Europa League y campeón del mundo con su selección, habría violado una mujer el año 2019 en su domicilio familiar de Buenos Aires.
Según la denuncia, la mujer habría asistido a una fiesta de cumpleaños en casa del jugador, con 25 personas más, donde habrían abusado sexualmente después de perder el conocimiento. De hecho, durante su exposición de los hechos, Montiel ha reconocido que conoce la presunta víctima que lo ha denunciado y también el hecho de haber mantenido “relaciones sexuales consentidas” con ella meses atrás. El caso sigue su curso legal.