La alegría de la primera vez se ha producido a expensas de arruinar una temporada histórica. Este miércoles el Atalanta se ha proclamado campeón del Europa League por primera vez en su historia después de superar por 3-0 el Bayer Leverkusen dirigido por Xabi Alonso en la final. El conjunto italiano ha provocado la primera derrota del club alemán este curso al momento más importante gracias a tres goles de Ademola Lookman, el mejor jugador del partido. Lejos del rendimiento mostrado en la Bundesliga durante el resto de la campaña, el equipo de Gian Piero Gasperini fue superior durante todo el enfrentamiento para denegar el triplete a los de Alonso.
El espectáculo de Lookman
El Atalanta fue superior gracias a una presión muy alta, mostrando ser un equipo muy bien organizado para poner dificultades en la salida de pelota del Bayer Leverkusen y contando con el acierto que marca diferencias. Lookman jugó su mejor partido de la temporada para dar a su club el primer título europeo muy celebrado en Italia, porque la última vez que un equipo italiano ganó una Europa League fue el 1999, cuando la consiguió el Parma. En la primera mitad, los de Gasperini encarrilaron mucho el enfrentamiento gracias a dos goles del nigeriano en el minuto doce y veintiséis. El primero fue con un remate al segundo palo después de una centrada lateral, mientras que el segundo gol fue una acción individual con calidad y potencia para superar Matej Kovar desde fuera del área. En la segunda parte, con el Bayer más fuera que dentro del partido, el extremo volvió a lucirse. Después de una bicicleta ante Edmond Tapsoba, volvió a superar Kovar con un potente chut.
El Bayer Leverkusen se despide del triplete y de la invencibilidad
El Bayer Leverkusen llegaba a la final como grande favorito porque todavía no había perdido un partido esta temporada. La última vez que el conjunto dirigido por Xabi Alonso pinchó fue hace 361 días y, además, aterrizaba a Dublin con la primera Bundesliga de la historia del club asegurada con cinco jornadas de antelación. Al partido definitivo del Europa League, pero, el Bayer mostró pocas de las virtudes que lo han convertido en uno de los grandes atractivos del fútbol europeo de este curso. El Leverkusen se encontró con jugadores fundamentales como el valenciano Alejandro Grimaldo, Florian Wirtz, Jeremie Frimpong o Granito Xhaka sin inspiración. Y sin la rebeldía del talento natural, los de Alonso no pudieron cambiar un duelo donde estaban siendo superados colectivamente e individualmente. El equipo, pero, todavía opta al doblete porque jugará la final de la Copa alemana este sábado contra el Kaiserslautern.
