Luis Rubiales, expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), ha declarado este martes en la Audiencia Nacional como investigado por agresión sexual y coacciones en el juicio por el beso a la jugadora Jennifer Hermoso después de la final del Mundial de 2023. Tras las declaraciones de varios testigos, ha llegado este martes uno de los momentos más esperados, con la comparecencia del expresidente de la RFEF ante el juez. Rubiales ha mantenido la misma versión que dio en la rueda de prensa de finales de agosto de 2023, en la cual anunció que no dimitiría por este caso. Así, el expresidente de la RFEF ha mantenido que hubo consentimiento: «Le pregunté si le podía dar un besito y ella me dijo que de acuerdo».
📺 TV EN DIRECTO | Luis Rubiales cambia su versión de los hechos y afirma ahora que le preguntó a Hermoso si le podía dar "un besito" y no "un piquito" como había declarado anteriormente en la junta de la RFEF y en su declaración del juzgado de instrucción https://t.co/ug9Httls0v pic.twitter.com/sXTYVxyE7E
— EL PAÍS (@el_pais) February 11, 2025
La declaración de Rubiales en sede judicial ha sido casi idéntica. Una de las diferencias que han llamado la atención, sin embargo, ha sido que ha cambiado el concepto «piquito«, que había dado en un primer momento en agosto de 2023, por «besito«. Previamente a su declaración, el perito ha certificado que Rubiales dijo la frase «¿te puedo dar un besito?«, pero también ha dejado claro que la futbolista no respondió de ninguna manera: «No se aprecia ninguna respuesta de la jugadora». Más allá de eso, Rubiales ha mantenido que Jenni Hermoso lo levantó del suelo antes del beso y que no fue él quien se lanzó sobre ella: «Es físicamente imposible». También ha defendido que el beso era adecuado, a pesar de ser su superior: «Era un momento de celebración».
Aunque Rubiales ha defendido que, por la relación personal que mantenía con Hermoso, el beso era una consecuencia casi natural (ha repetido que también da besos en los labios a sus hijas «por Año Nuevo» o «cuando lo aprueban todo»), sí ha dicho que ahora lo habría hecho diferente: «Debería haber tenido la sangre más fría y haber adoptado un papel más institucional, pero fue una muestra de afecto que no tiene nada que ver con la violencia machista». Así, ha dejado claro que no le ha pedido perdón a Hermoso y que no lo hará: «No es necesario, porque yo le pedí permiso». El único arrepentimiento que ha mostrado Rubiales ha sido respecto a una entrevista que concedió a la Cadena COPE poco después del beso, donde dijo que quien viera una agresión sexual era un «tonto»: «Sí, me equivoqué».
Rubiales habla de las coacciones a Jenni Hermoso tras el beso
En cuanto al delito de coacciones a la jugadora, Rubiales ha explicado que le pidió que se posicionara públicamente y que le apoyara, porque, asegura, en un comienzo, la jugadora le había restado importancia al beso: «Ambos pensábamos que era una tontería. Cambió de versión dos días después». No obstante, Rubiales sí ha confirmado que Hermoso se negó a exonerarlo públicamente desde un primer momento. Según la declaración de la futbolista de la semana pasada, su angustia respecto al beso fue creciendo con el paso de las horas, cuando asimiló qué había pasado tras la celebración del Mundial.
