El Athletic Club ha roto la maldición. Los vascos han derrotado al Mallorca en la gran final de la Copa del Rey y han vuelto a levantar un título 40 años después del último. El balance era de seis finales consecutivas perdidas y el fútbol le debía ya una al Athletic. El partido, pero, ha estado muy disputado y los mallorquines, que incluso se han avanzado en el marcador, han luchado hasta el final, pero han acabado cayendo a la tanda de penaltis (1-1, 4-2). Bilbao ha salido a las calles para celebrar, por fin, un nuevo título y una nueva Copa, la 24.ª del Athletic, el segundo Rey de Copas. Y la Gabarra, la embarcación utilizada para celebrar los títulos del conjunto vasco, volverá a salir 40 años después.
Inicio igualado… y el Mallorca sorprende
Parecía que el guion del enfrentamiento estaba ya escrito, con el dominio de la pelota para el Athletic y el Mallorca detrás buscando su oportunidad, pero no ha sido así. Con el paso de los minutos, los mallorquines han crecido y se han mostrado muy cómodos sobre el terreno de juego. Y, por eso, han aprovechado la oportunidad de avanzarse en el marcador. Después de varios rechaces en el área bilbaína en un córner, Dani Rodríguez ha encontrado el fondo de la red con un chut ajustado al palo. En La Cartuja, jugadores y aficionados del Mallorca han visto posible el milagro. El gol le ha hecho daño al Athletic, pero no ha bajado los brazos y ha buscado el empate con insistencia. Sobre todo, a partir de las botas de Nico Williams, el mejor jugador del partido. Y es que al delantero vasco le han anulado un gol por fuera de juego y ha estado a punto de marcar en varias ocasiones, pero el marcador no se ha movido más al descanso.

El Athletic busca el empate… y lo encuentra
La segunda parte ha empezado eléctrica y con un Athletic más incisivo. El conjunto entrenado por Ernesto Valverde ha querido empatar enseguida y ha obtenido el premio a la insistencia gracias, una vez más, a Nico Williams. Un pase filtrado del delantero ha habilitado a Oihan Sancet, que solo ha tenido que fusilar a Dominik Greif para poner las tablas en el marcador. A partir de aquí, el Athletic ha tomado las riendas del partido y ha buscado el gol de la victoria para lograr una Copa 40 años después, pero el Mallorca ha aguantado todas las embestidas vascas y el partido se ha ido a la prórroga. Y en el tiempo suplementario, poca cosa. Con los jugadores muy cansados, no se ha disfrutado de un gran juego y, finalmente, ha parecido que ambos equipos han buscado la lotería de los penaltis.
Julen Agirrezabala, el héroe vasco
En la tanda, ha sido el portero del Athletic, Julen Agirrezabala, quien se ha convertido en el héroe de la final para llevar la Copa a casa. Ha parado el segundo penalti a Manu Morlanes, hecho que ha provocado que el Mallorca fuera por detrás durante todo el resto de la tanda de penaltis y los jugadores mallorquines hicieran más errores. Finalmente, Álex Berenguer ha marcado el penalti decisivo y se ha desatado la euforia en la grada de los aficionados del Athletic y en el terreno de juego. Y es que el conjunto vasco ha podido celebrar un nuevo título 40 años después.