El Liverpool ha demostrado una vez más los valores que defiende dentro y fuera del campo con un gesto de gran humanidad hacia la familia de Diogo Jota. Tras la trágica muerte del futbolista portugués, de 28 años, y de su hermano André Silva, de 25 y jugador del Penafiel, en un accidente de tráfico en Zamora, el club ha decidido pagar a sus familiares los dos años de contrato que le quedaban hasta 2027. Esta ayuda económica se destinará especialmente a su esposa, Rute, y sus tres hijos, a quienes el Liverpool ha garantizado apoyo constante en estos momentos tan difíciles.
El impacto del suceso ha sido profundo en el vestuario y en toda la afición ‘red’. Una delegación numerosa de jugadores y del técnico, Arne Slot, se ha desplazado hasta Gondomar, en Portugal, para asistir al entierro, que ha tenido lugar esta mañana. Entre los presentes había jugadores actuales y exjugadores del Liverpool como Virgil van Dijk, Andy Robertson, Jordan Henderson, James Milner, Alexis Mac Allister, etc. También se contó con la presencia de internacionales portugueses como Bruno Fernandes, Bernardo Silva, Rúben Dias, Danilo Pereira, o João Cancelo y Rúben Neves, que han hecho el esfuerzo de viajar a pesar de haber jugado con el Al-Hilal los cuartos de final del Mundial de Clubes solo un día antes. También asistió el seleccionador Robert Martínez.
El club y la ciudad se despiden de Jota
El club también ha anunciado la retirada del dorsal ‘20’ que Diogo Jota lucía como reconocimiento a su contribución en la consecución de la Premier League número 20 del Liverpool. En la ciudad de Liverpool, miles de aficionados han querido sumarse al homenaje improvisado desde el mismo jueves, llevando flores y recordando a Diogo Jota y a su hermano frente al estadio de Anfield.
