Las sensaciones del Barça antes del partido decisivo de Champions contra el Nápoles de este el próximo martes no son las mejores. El equipo no encuentra argumentos en su juego para creer en una victoria sólida contra los italianos, pero, allí donde no está llegando el colectivo y la estrategia, llega el talento individual. Lamine Yamal ha decidido el partido de Liga del Fútbol Club Barcelona de este viernes contra el Mallorca en el Estadio Olímpico Lluís Companys con un golazo solo al alcance de los elegidos (1-0). El joven delantero catalán es ahora mismo el talento más grande del Barça y el gran argumento para creer en una victoria contra el Nápoles y la clasificación para los cuartos de final de la Champions.
La crónica del Barça-Mallorca (1-0)
Xavi Hernández ha presentado una alineación del todo inédita, con solo un centrocampista puro, Ilkay Gündogan, que ha estado acompañado por Andreas Christensen, que ha hecho de pivote, y Raphinha, que ha hecho de interior. Además, ha dado la titularidad a Marc Guiu, para dar descanso a Robert Lewandowski de cara al Nápoles y por delante de Vitor Roque. Con un sistema con cinco defensores sobre el terreno de juego, el Barça se ha empezado a construir desde detrás, con mucha solidez y bien ordenado.
Quien ha dado fluidez al juego del Barça desde el medio del campo ha sido Gündogan. Por él han pasado todas las jugadas de ataque con sentido, mientras que Lamine ha sido el encargado de desbordar por la banda derecha. Un pase del delantero catalán ha dejado a Raphinha en carrera en el interior del área y le han hecho caer. El VAR, después de revisarlo, ha dado penalti al Barça, pero Gündogan no ha podido poner el lazo a su buena primera parte y ha fallado el lanzamiento desde los once metros.
Después del penalti fallado, el Mallorca se ha crecido y ha creído en sus posibilidades de dar la sorpresa. Los baleares han empezado a llegar al área de Ter Stegen, pero los centrales azulgranas, Pau Cubarsí e Iñigo Martínez, han estado imperiales para evitar que el peligro del Mallorca acabara en gol. El jovencísimo defensa catalán, de hecho, ha sido el mejor de los dos y, nuevamente, ha mostrado su gran calidad a la hora de sacar el balón jugado.
Un rato después del penalti que ha provocado, Raphinha, que había quedado tocado por la falta recibida, ha tenido que retirarse lesionado del terreno de juego. En su lugar ha entrado Fermín López, que ha revolucionado los últimos minutos de la primera parte. Ha tenido la ocasión más clara de los culés aparte del penalti con un remate de cabeza que ha obligado a Predrag Rajkovic, portero del Mallorca, a intervenir con una buena parada. De este modo se ha llegado al descanso.

En la reanudación, el Barça ha dado un paso adelante en ataque y ha buscado el gol con más insistencia. Joao Félix se ha inventado un chut raso desde el lateral de la portería que ha tenido que parar Rajkovic. Más allá de esto, poca cosa del portugués. Lamine Yamal también ha estado a punto de marcar con un disparo muy lejano que también ha sacado el portero del Mallorca con una gran intervención. Gündogan podría haber reparado el error del penalti en una acción donde Marc Guiu le ha dejado en una gran posición para marcar, pero el alemán ha rematado demasiado flojo.
Con el paso de los minutos, Xavi ha visto como el gol todavía no acababa de llegar y ha puesto toda la carne en el asador. Vitor Roque y Robert Lewandowski han entrado por Joao Félix y Marc Guiu y el campo ha hecho todavía más bajada hacia la portería de Rajkovic. Y, finalmente, ha llegado el gol, pero no ha sido obra de ninguno de ellos dos, sino del mejor jugador del Barça de esta temporada: Lamine Yamal. El extremo catalán se ha inventado un disparo espectacular después de un recorte sensacional en el interior del área. Nadie había visto aquel agujero, solo él, y le ha clavado un tanto de póster a Rajkovic, que solo ha podido mirar como la pelota entraba por la escuadra.
A pesar de que después del gol de Lamine todavía quedaban unos cuantos minutos por delante, el Mallorca ha quedado totalmente tocado por esta acción de genio del catalán. Los baleares ya no han conseguido crear mucho peligro en el área azulgrana y, las pocas veces que han llegado, han sido resueltas por un enorme Cubarsí. El Barça tampoco ha sentenciado el duelo, pero no ha sido necesario. Ahora, los culés ya pueden pensar únicamente y exclusivamente en el partido contra el Nápoles del próximo martes.