El Getafe Club de Fútbol ha conseguido rascar un punto de la visita del Fútbol Club Barcelona al Coliseum Alfonso Pérez en el primer partido de Liga. A pesar de que los azulgranas han sido los grandes dominadores del juego y que han disfrutado de más ocasiones de gol, el equipo madrileño entrenado por José Bordalás ha conseguido evitar la victoria azulgrana con su característico antifútbol: faltas al límite del reglamento que el árbitro no ha sabido controlar, pérdidas de tiempo constantes, una defensa dura y agresiva… todo ello ha conformado un ambiente que ha obtenido la recompensa que esperaba: desconcentrar a los jugadores del Barça y sacarlos del partido.
José Bordalás, gran señalado del Getafe-Barça
Como siempre se dice en estos casos, la estrategia de Bordalás es perfectamente lícita. Es una forma de jugar a fútbol que tiene, como principal objetivo, que no se juegue a fútbol. En principio, este plan de partido tendría que ser muy arriesgado, puesto que tendría que comportar muchas tarjetas y expulsiones para los jugadores del equipo que lo protagoniza. Sin embargo, Bordalás sale casi siempre recompensado, puesto que los árbitros de la Liga no son nada contundentes y permiten que sus conjuntos hagan el partido que quieran. Como no podía ser de otro modo, Xavi Hernández, que ha protestado durante el duelo y ha acabado expulsado, se ha quejado del arbitraje y ha asegurado que ha sido «una vergüenza». Bordalás, cuando ha oído esto, ha afirmado que las declaraciones de Xavi eran una «falta de respeto».

De este modo, si bien Bordalás ha conseguido su objetivo de obtener un punto, ha quedado señalado ante todo el mundo del fútbol. Todos los espectadores que han visto este partido, que han sido muchos más de los que acostumbran a ver un partido del Getafe, puesto que el rival era el Barça, se han llevado las manos a la cabeza al ver el estilo de juego del entrenador valenciano. Con sus declaraciones y su actitud altiva, Bordalás ha dejado más que claro que él continuará por este camino. Los árbitros de la Liga tendrían que ser los encargados de parar este fútbol antideportivo, pero, de momento, los colegiados españoles han vuelto a demostrar que prefieren dar vía libre a Bordalás, así que todo continuará igual.