El Fútbol Club Barcelona ha caído con crueldad en el regreso de las semifinales de la UEFA Champions League y se ha quedado a un paso de alcanzar la gran final de la máxima competición continental. El Barça remontó un 2-0 en contra en la segunda parte contra el Inter de Milán, y cuando parecía que el gol de Raphinha al final del partido llevaría al conjunto azulgrana a Múnich, los italianos lograron el empate y, en la prórroga, acabaron de sellar definitivamente el sueño culé de volver a una final de la Champions 10 años después. A pesar de esto, el barcelonismo debe estar orgulloso de este equipo, tanto ahora, en el presente, como de cara al futuro.

El barcelonismo debe estar orgulloso de lo que ha hecho el Barça

El Barça ha dicho adiós a la Champions con la cabeza bien alta y demostrando que esto solo es el principio de todo. Con un equipo lleno de jóvenes y la irrupción de Hansi Flick desde el banquillo, seguro que, en los próximos años, habrá muchas más oportunidades de saborear la Liga de Campeones, un título que lleva una década volando lejos de Barcelona. Después de unos años muy duros, el conjunto azulgrana ha vuelto a ser un elenco portentoso en Europa, como ha demostrado este curso, y no mereció caer de una manera tan cruel como lo que sucedió en Milán este martes.

Lamine Yamal, durante el Inter-Barça de regreso de las semifinales de la Champions | Europa Press
Lamine Yamal, durante el Inter-Barça de regreso de las semifinales de la Champions | Europa Press

Los culés, sin embargo, han visto cómo prácticamente todos los jugadores se dejaron la piel en el campo para intentar alcanzar el sueño de todo un equipo y de toda una afición, y aunque no se pudo lograr, orgullo y gloria para un Barça que ha devuelto la ilusión a los seguidores después de unas temporadas viviendo los momentos más duros del fútbol.



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