El Futbol Club Barcelona se ha impuesto al Vila-real en el Estadi de la Ceràmica en el partido correspondiente a la decimoctava jornada de Liga. El conjunto blaugrana no ha hecho una gran actuación, sobre todo en defensa, con muchas desconexiones y errores incomprensibles. Hay que tener en cuenta, también, que tenía enfrente a un gran rival que no ha puesto las cosas fáciles. La victoria del Barça se explica gracias a los goles de Raphinha y Lamine Yamal, pero, sobre todo gracias a un Joan Garcia descomunal, que ha hecho un auténtico partidazo (0-2). Con este triunfo, el conjunto blaugrana termina el año 2025 al frente de la clasificación de la Liga, con cuatro puntos de ventaja sobre el Real Madrid.
La crónica del Vila-real-Barça (0-2)
En la primera parte ha pasado de todo. De inmediato, ha caído el primer gol de los blaugranas. Raphinha ha forzado un penalti que él mismo ha convertido. Poco tiempo después, el mismo delantero brasileño envió un remate lejano al travesaño. A la vez, sin embargo, el Vila-real llegaba con mucho peligro. Las desconcentraciones de toda la defensa, formada por Jules Kounde, Pau Cubarsí, Gerard Martín y Alejandro Balde, han puesto a Joan Garcia en problemas constantemente, pero el portero catalán ha firmado una actuación espectacular durante los noventa minutos para mantener la portería a cero.
Entre las acciones más destacadas de la primera mitad, hay un gol en propia puerta de Kounde que, afortunadamente para los intereses blaugranas, quedó anulado. Los jugadores del Vila-real han estado muy intensos durante todo el duelo, rozando el juego sucio una y otra vez. El árbitro, durante los primeros minutos, ha sido muy permisivo, pero esto cambió de repente con una entrada durísima de Renato Veiga sobre Lamine Yamal. El jugador groguet llegó tardísimo y, además, cazó de lleno el pie del astro catalán. El colegiado no lo dudó y le mostró la tarjeta roja directa. De esta manera, se llegó al descanso.
En la segunda parte, con superioridad numérica, el Barça ha tenido mucha posesión de balón, pero más allá de algunos tramos concretos en los que sí el conjunto blaugrana ha rondado la portería contraria, los culés se han limitado a gestionar el resultado. En un momento de arranque, eso sí, Lamine Yamal aprovechó una jugada enredada en el interior del área rival para sentenciar el partido con un disparo potente. En la recta final del duelo, Joan Garcia se hizo gigante con varias paradas de muchísimo mérito para tranquilidad de los culés. De esta manera, el Barça se impuso contra un gran equipo, con un partido gris, pero resolutivo.
