Hablar de un escándalo arbitral o de robo en el clásico de la segunda vuelta de la Liga sería, probablemente, demasiado osado. Aun así, muchos seguidores del Fútbol Club Barcelona están indignados con el arbitraje de César Soto Grado. El motivo es que en tres jugadas clave del partido, las cuales podrían haber caído de cualquier lado, las decisiones del colegiado castellano han favorecido al Real Madrid. En los últimos meses ha aparecido un mantra entre el barcelonismo: cuando hay acciones polémicas, la moneda acostumbra a salir cruz para el Barça y cara para los blancos. En el clásico, se ha mantenido la misma dinámica.
El penalti de Cubarsí a Lucas Vázquez
El Madrid ha empatado el gol tempranero del Barça con un penalti transformado por Vinicius Jr. Lo ha provocado Lucas Vázquez, después de driblar a Joao Cancelo con demasiada facilidad y caer en el interior del área por una choque con Pau Cubarsí. De entrada, el penalti parecía claro. Sin embargo, en las repeticiones se puede ver como Lucas Vázquez busca claramente la pierna del central catalán y, entonces, aprovecha para caer. Exárbitros como Joan Fàbregas o Xavier Estrada Fernández creen que no es penal, mientras que Mateu Lahoz sí que ve infracción. En cualquier caso, todos ellos coinciden que Soto Grado lo tendría que haber ido a consultar al VAR. Sea como fuere, es una acción polémica, donde los árbitros no se ponen de acuerdo, pero que sale cruz para el Barça.
El gol fantasma de Lamine Yamal
Sin ningún tipo de duda, ha sido la acción más comentada del partido. Lamine Yamal ha rematado un centro entre los tres palos en la primera mitad y Andriy Lunin, portero merengue, ha rechazado la pelota. Ahora bien, los jugadores del Barça han reclamado el gol, puesto que consideran que el balón ha atravesado del todo la línea. La ausencia de la tecnología de gol en la Liga y el hecho de que ninguna cámara lo estaba enfocando claramente ha creado mucha controversia. En algunas imágenes, parece que la pelota entra del todo. De todas maneras, no se puede confirmar, puesto que la infraestructura de la Liga no lo permite. El árbitro podría haber visto gol, pero no lo ha hecho. Otra vez, cruz para el Barça.
La posible tarjeta roja a Camavinga
También en la primera mitad, en una jugada donde Lamine Yamal se iba solo hacia la portería de Lunin, Eduardo Camavinga le ha hecho caer con falta, sin ninguna posibilidad de disputar la pelota. En una acción como esta, si el árbitro considera que había ocasión de gol, puede mostrar la tarjeta roja directa. En vez de esto, Camavinga ha visto la amarilla. Nuevamente, es una decisión que depende del criterio arbitral y cualquiera de las dos tarjetas habría sido una opción comprensible. Ahora bien, Soto Grado ha vuelto a ser benevolente con el Madrid. Tres de tres: al Barça siempre le sale cruz.
