Ronald Araujo, centrocampista uruguayo del Fútbol Club Barcelona, durante un acto en el que se ha dirigido a los medios de comunicación, ha confirmado lo que ya se había intuido en los últimos días: que ha estallado una guerra en el vestuario del Barça. Después de que el centrocampista alemán Ilkay Gündogan recriminara públicamente el error de Araujo que condenó al conjunto azulgrana en la Champions contra el París Saint-Germain (PSG), el uruguayo ha cargado contra él: «Prefiero no decir qué pienso sobre las palabras de Gündogan, porque tengo unos valores que se tienen que respetar».
Gündogan y Araujo, dos bandos en el vestuario del Barça
Hay que recordar que en las horas posteriores a estas palabras de Gündogan, que llegaron justo después del partido, ya salió Jules Koundé, compañero de Araujo en la línea defensiva del Barça, para defender al uruguayo. El francés advirtió que «cuando perdemos, lo hacemos todos» y no hay que señalar los errores de uno de los jugadores. Si bien Koundé no se refirió directamente a las palabras de Gündogan, mucha gente sospechó que los tiros iban por aquí. Ahora se ha confirmado, cosa que demuestra que se vive un ambiente tenso en el vestuario del Barça. Xavi Hernández, entrenador culé, por su parte, ha dado fiesta a los jugadores para acabar de digerir la derrota contra el PSG, si bien este domingo hay el clásico de Liga en el Santiago Bernabéu.

Araujo, por su parte, también ha agradecido el apoyo a la afición a pesar de la eliminación y su error, si bien ha reconocido estar «triste». Además, también ha dejado entrever que su renovación con el Barça está cerca y que no tiene la intención de ir a ningún otro club el próximo verano, por mucho que se haya hablado de esta opción en los medios: «El proceso de renovación va bien».