Pedri es, sencillamente, el mejor centrocampista del mundo. Todo lo que toca es magia, cada pase tiene sentido, cada decisión es la correcta y en cada momento sabe exactamente qué necesita el partido. Ayer, en St. James’ Park frente al Newcastle, dio una nueva lección magistral: 111 toques, control absoluto de los tempos y la capacidad de convertir un ambiente infernal en una obra de arte futbolística. Su dominio del ritmo y su inteligencia táctica lo sitúan un paso por delante de todos, como ya demostró con una temporada pasada impresionante que lo consolidó como metrónomo blaugrana. Esta grandeza no ha pasado desapercibida y Thierry Henry, leyenda del Fútbol Club Barcelona, del Arsenal y campeón del mundo con Francia, lo expresó con una metáfora deliciosa: “Pedri ve el partido de otra manera. Si tocas esta pelota, Pedri dice: ‘No toques esta pelota. No hagas eso’. Si mueves algo, te dice: ‘¿Por qué lo has movido? No toques mis cosas’”. Con estas palabras, Henry destacaba el liderazgo y el criterio del canario, capaz de dictar qué se debe hacer en cada momento. «Es el jugador que más se parece a Laudrup«, asegura la leyenda francesa.
Henry, Scholes y Grealish
El eco fue inmediato y las reacciones se multiplicaron en las redes. Jack Grealish, actual jugador del Everton y campeón de Europa con el City de Guardiola, escribió: “Pedri y De Jong son un placer de ver”. Pero una de las frases que tuvo más impacto fue la de Paul Scholes, leyenda del Manchester United y voz respetada del fútbol inglés, que confesó en Instagram: “Mi nuevo futbolista favorito”. Cuando un mito del fútbol de campo como Scholes cae rendido de esta manera, queda claro que Pedri ha traspasado fronteras y se ha ganado el respeto universal.
🚨📲 | Paul Scholes on IG: «MY NEW FAVORITE FOOTBALLER» ❤ pic.twitter.com/mYP3o9A7mr
— BarçaTimes (@BarcaTimes) September 18, 2025
En St. James’ Park, Pedri convirtió un ambiente infernal en su propio escenario. Tocó el balón más de cien veces, con un 91% de acierto en el pase, y ganó más duelos que nadie sobre el césped. Las estadísticas impresionan, pero lo que realmente pesa es la sensación: cuando él juega, parece que el tiempo se detiene, que sus compañeros encuentran siempre la salida y que los rivales se desesperan ante un futbolista que sabe exactamente qué hacer en cada momento. Los datos, los elogios y el efecto que genera confirman lo que cada vez más voces coinciden en afirmar: Pedri es hoy el mejor centrocampista del fútbol mundial.