Ivan Rakitic vive sus últimos años como jugador de fútbol. Con 36 años, el exjugador del Fútbol Club Barcelona ha vuelto a su país natal, Croacia, para finalizar su carrera en el Hajduk Split después de una aventura corta en Arabia Saudí. Rakitic ha hablado en una entrevista a Canal Sur Radio sobre su paso por Barcelona y las duras eliminaciones en la Champions League con Ernesto Valverde.
Para sorpresa de todo el mundo, Rakitic ha explicado que los fracasos en la Champions contra la Roma y el Liverpool las temporadas 2017/18 y 2018/19 se deben «al aburrimiento«. «La cagamos contra la Roma y el Liverpool, pero estoy convencido de que nos afectó este aburrimiento de sentirnos demasiado superiores. Si no se da el máximo, no ganas», ha explicado el exjugador del Barça y Sevilla. Hay que recordar que aquel equipo consiguió el triplete la temporada 2014/15 con uno de los mejores tridentes de la historia del fútbol formado por Messi, Suárez y Neymar.
Según Rakitic aquel equipo podría haber ganado más títulos si hubieran mantenido la concentración. «Si hubiéramos mantenido el hambre, habríamos ganado una o dos Champions más. Por mí, con todo el afecto y el respeto para todos los equipos, en el Barça no ganamos más títulos por el mismo aburrimiento y por pensar en otras cosas que no eran el fútbol», ha afirmado.
La salida del Sevilla y la vuelta a Croacia
El exjugador del Barça ha hablado también de su salida del Sevilla hacia la liga de Arabia Saudí. Rakitic ha explicado su mala relación con Quique Sánchez Flores: «No es que aguantara o no, pero no estaba de acuerdo con las cosas que estaban pasando. No pienso en mí mismo, sino en el grupo y el Sevilla. No estaba de acuerdo como se estaban haciendo las cosas». «Aguanto por el Sevilla lo que haga falta, pero si hay una persona que lo ve diferente, no me he equivocado, porque las entrevistas que ha dado él no me han gustado. Tomé la decisión correcta», ha añadido.
Finalmente, después de jugar unos meses en la liga saudí, Rakitic ha explicado que en su retorno al fútbol croata ha sido importando su mujer. «Fue una decisión de corazón y el último empujón me lo dio mi mujer, Raquel. Me dijo que le encantaría ir con toda la familia. Simplemente, para tener este orgullo de poder estar en mi país, jugar en la Liga croata y enseñar mi país a mi familia», ha explicado.
