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El padre de Lamine Yamal genera controversia con el Balón de Oro

La reacción de Mounir Nasraoui, padre de Lamine Yamal, después de que su hijo no haya ganado el Balón de Oro está generando mucha controversia. Nasraoui ha estallado de indignación tras saber que el jugador del Fútbol Club Barcelona no se llevaba el premio. Aunque el joven delantero del Barça ha ganado el Trofeo Kopa al mejor jugador joven del año y el Balón de Plata, Nasraoui, en declaraciones a Mega, ha cargado con dureza contra el veredicto final que ha coronado a Ousmane Dembélé, del París Saint-Germain (PSG), como mejor futbolista del mundo.

Mounir Nasraoui, padre de Lamine Yamal: «Ha pasado algo muy extraño»

El padre de Lamine no se ha mordido la lengua: «Es el más grande, no diré robo, pero sí un daño moral a un ser humano. Lamine Yamal es el mejor jugador del mundo con mucha diferencia y aquí ha pasado algo muy extraño». Su discurso ha contrastado de lleno con la actitud serena del joven blaugrana, que ha mantenido las formas, ha celebrado sus premios y ha posado para las fotos con el resto de galardonados y, incluso, ha felicitado ampliamente a Dembélé.

Dembélé y Lamine Yamal, durante la gala del Balón de Oro | @ballondor
Dembélé y Lamine Yamal, durante la gala del Balón de Oro | @ballondor

Esta reacción del padre de Lamine Yamal llega en un contexto en el que el Balón de Oro no deja de generar polémicas. Hace un año fue el Real Madrid quien plantó la gala como protesta por lo que consideraba una injusticia con Vinicius Jr. Esta vez, el Barça ha asistido con toda su plana mayor, incluidos Laporta, Hansi Flick y algunos jugadores, mostrando sensatez y deportividad a pesar de no ser favoritos. Las palabras de Nasraoui, sin embargo, han vuelto a generar debate sobre el premio, si bien el barcelonismo tampoco se ha quejado mucho de la derrota de Lamine Lamal. A pesar del enojo paterno, Lamine Yamal ha salido de París con un mensaje positivo y agradecido hacia el Barça y la selección española. El padre, en cambio, ha querido dejar un mensaje contundente de cara al futuro: “El año próximo el Balón de Oro se quedará en casa”.



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