El Fútbol Club Barcelona ha cedido al delantero guineano Ansu Fati al Mónaco durante una temporada. Este movimiento se ha producido después de renovar el contrato del jugador un año más. Ahora, en lugar de expirar en el verano de 2027, lo hará en el verano de 2028. De esta manera, se ha diferido el sueldo que debía cobrar en los próximos dos años en tres, lo cual ha favorecido su cesión, ya que la parte del salario que le deberá abonar el Mónaco no será tan alta, y también aliviará la masa salarial del Barça. Se trata de un movimiento estratégico para poder operar con normalidad en el mercado de fichajes de verano y así afrontar la incorporación de un extremo izquierdo, presumiblemente Nico Williams.
Ansu Fati: una nueva cesión para intentar renacer
Esta es la segunda vez que Ansu Fati se va cedido. La primera fue hace dos años, cuando fue al Brighton de la Premier League. Aunque no triunfó, en este curso pasado el Barça intentó recuperarlo para el equipo de Hansi Flick, pero su participación ha sido prácticamente testimonial. Así pues, el futbolista, que aún tiene 22 años, buscará una nueva oportunidad de volver a parecerse al jugador que fue entre 2019 y 2021 y que apuntaba a ser un proyecto de auténtica estrella.
Ansu Fati irrumpió en el Barça con solo dieciséis años, en el verano de 2019, y dejó a todos maravillados con su capacidad goleadora. Esa temporada, anotó ocho goles. El curso siguiente comenzó con aún más fuerza y marcó cinco dianas en solo diez duelos. Sin embargo, una durísima lesión de rodilla en un partido contra el Betis truncó su carrera de golpe. Desde entonces, ha pasado por un periplo muy complicado de problemas físicos de los que no ha podido recuperarse del todo. Aún busca recuperar aquella chispa con la que irrumpió en el mundo del fútbol, pero cada vez parece más complicado. Habrá que ver si en el Mónaco tiene las oportunidades necesarias para lograrlo.
