El FC Barcelona vuelve a la Liga este 2025 con una convocatoria cargada de novedades para enfrentarse al Getafe esta noche en el Coliseum (21.00 h). Entre los nombres destacados, sobresale el de Andreas Christensen, que regresa después de cinco meses fuera por una tendinopatía en el tendón de Aquiles izquierdo. El danés, que se lesionó al inicio de la temporada durante el duelo contra el Valencia, ha recibido el alta médica y ya está disponible para el técnico Hansi Flick.
El regreso del central llega en un momento crucial, después de que la ausencia de Iñigo Martínez, lesionado durante cuatro semanas, deje un vacío en el eje defensivo. No obstante, todo apunta a que Christensen deberá esperar su momento desde el banquillo, ya que Ronald Araujo y Pau Cubarsí se han consolidado como la pareja titular. «Su polivalencia puede ser clave en los próximos partidos», ha destacado Flick en rueda de prensa, haciendo referencia a la capacidad del danés para jugar tanto de central como de mediocampista defensivo.
Christensen regresa a la convocatoria después de 154 días de ausencia, pero el futuro de Ansu Fati es cada vez más incierto
Otro nombre propio de la convocatoria es el del portero Wojciech Szczesny, que regresa tras cumplir sanción por la expulsión en la final de la Supercopa. El polaco será una alternativa a Iñaki Peña, aunque Flick no ha confirmado si habrá cambios en la portería.
Mientras tanto, Ansu Fati continúa siendo el gran descartado del entrenador alemán. Esta es la cuarta convocatoria consecutiva en la que el joven delantero no figura, alimentando los rumores de una posible salida durante el mercado de invierno. A pesar de las palabras positivas del técnico sobre su actitud, lo cierto es que las oportunidades han sido mínimas esta temporada.
El Barça, que ha firmado un buen inicio de año tras conquistar la Supercopa de España y avanzar en la Copa del Rey, buscará mantener la inercia positiva en este partido de la Liga. Con bajas importantes como las de Ter Stegen y Marc Bernal, Flick deberá gestionar una plantilla joven y con algunas piezas que aún necesitan recuperar el ritmo de competición. El partido de esta noche en el Coliseum será una prueba de fuego para un Barça que quiere consolidarse en la parte alta de la clasificación y comenzar con buen pie esta segunda vuelta de la competición.
