El Fútbol Club Barcelona anunció la marcha de Mariona Caldentey el pasado miércoles. La mallorquina, que ha estado 10 años en el club azulgrana, abandonará la entidad a final de temporada para irse al Arsenal londinense. Por eso, la jugadora se ha querido despedir en una rueda de prensa muy emotiva y dónde ha estado rodeada de familiares y compañeras de equipo. Mariona, muy emocionada, ha recordado cómo ha vivido desde muy pequeña ser del Barça: «Mis primeros recuerdos futbolísticos fueron del Barcelona. La camiseta, las botas de Ronaldinho, los recuerdos en el Camp Nou… El Barça es mi vida y me la ha cambiado«.
A pesar de que ya hace 10 años de su debut, cuando solo tenía 18 años, la mallorquina lo recuerda muy bien, como si fuera ayer: «Cuando con 18 años tuve la oportunidad de venir, no tuve que meditar nada, la decisión no se tuvo que tomar«. Así, después de más de 300 partidos, más de 100 goles y 25 títulos, Mariona ha confesado que poder jugar en el club «ha sido un sueño maravilloso y que después de 10 años, si es que era posible, me voy más culé que nunca«. Por lo tanto, después de conseguir un póker histórico, la delantera se va por la puerta grande.
Nuevos retos en su carrera
Mariona ha confesado que se va del Barça para lograr nuevos retos en su carrera: «La decisión ha sido muy difícil porque aquí he estado muy feliz. Tenía la sensación de que ahora necesitaba retos nuevos. Si dejo el Barça es para irme de la Liga española«. En este sentido, se irá a Inglaterra, donde la liga de allí es mucho mejor. Así lo ha querido asegurar la jugadora: «Ves otras ligas y entran ganas de jugar allí. La carrera de una futbolista es corta y pasa muy deprisa. Tengo 28 años y quería probar una cosa nueva«.
Duras palabras a la Liga F
Al final de su comparecencia, Mariona ha querido hablar sobre el estado actual de la Liga F y ha cargado contra sus dirigentes: «El número de equipos es excesivo, y esto hace que el calendario y el número de partidos no sea sano para las jugadoras. Y a partir de aquí hay que mejorar las estructuras y los campos donde a veces jugamos. Son muchos temas que han salido ya otras veces y que en algún momento se tendrían que cambiar, para que la Liga F no tenga solo el nombre de profesional, sino que también sea realmente profesional«. La mallorquina, que la temporada que viene jugará en la Women’s Super League, la liga inglesa femenina, sabe que las condiciones son mejores, el número de equipos es más bajo y la competitividad no tiene nada que ver con la Liga F.
