El Barça Femenino sigue imbatible en la Liga tras superar a un resistente Athletic Club por 0-2 en San Mamés. El conjunto blaugrana no resolvió el partido hasta los últimos instantes, con goles de Alèxia Putellas y Vicky López, en un duelo marcado por las ocasiones desaprovechadas y la solidez defensiva local.
Desde el inicio, el Barça tomó el control del partido, con largas posesiones y la primera llegada peligrosa a cargo de Aitana Bonmatí, que envió un tiro desviado en el minuto 9. A pesar del dominio culé, el Athletic mostró su condición de equipo en forma, creando su gran ocasión en el minuto 26: un doble remate de Azkona y Leire Baños, que se estrelló dos veces en el poste.
Las blaugranas, que tuvieron dificultades para generar ocasiones claras, lo intentaron sin éxito a través de Clàudia Pina y Salma Paralluelo, pero el marcador no se movió antes del descanso. La defensa local, liderada por Adriana Nanclares bajo palos, frustró las acciones culés.
Los cambios de Pere Romeu marcaron la diferencia para lograr el quince de quince
La segunda mitad comenzó con el mismo guión: dominio del Barça, pero sin concreción. Con el paso de los minutos, Pere Romeu dio entrada a Alèxia Putellas, Ewa Pajor y Patri Guijarro, movimientos clave para desbloquear el partido. El primer aviso claro del segundo tiempo llegó en el minuto 63, con una recuperación de Paralluelo que permitió una acción individual de Aitana Bonmatí. A pesar de un primer tiro desviado por Nanclares, Alèxia tampoco acertó con el rechazo.
Cuando parecía que el Athletic podría arrancar un empate, surgió el talento culé. En el minuto 90, Pajor asistió a Alèxia, que con un sombrero espectacular y un tiro con la izquierda inauguró el marcador, silenciando a los 17.698 espectadores presentes. Ya en el tiempo de descuento, un remate de Vicky López, desviado por Maddi, selló la victoria culé.
Con este triunfo, el Barça mantiene el pleno de puntos (15 de 15) y refuerza su liderazgo en la Primera División Femenina. A pesar de la resistencia local, el conjunto de Pere Romeu ha demostrado que sabe sufrir y resolver en momentos clave, gracias al talento individual y la profundidad de plantilla.
