Días muy movidos en Tarragona. Después del ascenso frustrado del Nàstic a la Segunda División en el último minuto contra el Málaga, el partido todavía lleva mucha cola. La indignación de los aficionados y los jugadores por el arbitraje muy polémico de Eder Mallo acabó con lanzamiento de objetos de la grada contra los colegiados y varios enfrentamientos de futbolistas con los árbitros. Ahora, la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha hecho públicas las sanciones que ha aplicado al Nàstic por estos actos, las cuales son muy duras y dejan al club tarraconense todavía más tocado.
Las sanciones de la RFEF al Nàstic
Por un lado, el Nou Estadi Costa Daurada de Tarragona tendrá que vivir sus primeros partidos de la temporada a puerta cerrada. Es decir, los cuatro primeros duelos de la Primera RFEF del curso que viene serán sin público. Además, el club también tendrá que pagar una sanción económica. Todo ello se debe a los insultos y supuestas «amenazas de muerte» a los árbitros, así como al lanzamiento de objetos contra ellos y al lanzamiento de balones para intentar frustrar el desarrollo del partido durante la prórroga, cosa que muchos aficionados han criticado, puesto que el duelo se tuvo que parar y el Málaga resurgió después de esto.
Por otro lado, David Concha, jugador del Nàstic, ha sido castigado con doce partidos sin jugar por insultos y agresiones a los árbitros. Nacho González, otro futbolista grana, también ha sido sancionado por el mismo motivo, con un total de tres meses sin poder disputar partidos. El club y los jugadores tendrán que pagar también multas económicas. El Gimnàstic de Tarragona ya ha anunciado que recorrerá estas sanciones, las cuales considera «totalmente desmesuradas» y recuerda que «acudirá a la justicia ordinaria para la aclaración de los hechos de una forma imparcial».
