La selección catalana ha disputado este miércoles su partido anual contra la selección de Costa Rica en el Estadio Johan Cruyff. El resultado ha sido de victoria local por dos goles a cero, con anotaciones de Antoniu Roca y Carles Aleñá. A pesar de las dificultades que imponen la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), los clubes estatales o el mismo Estado español, la selección catalana ha podido enfrentarse a un equipo mundialista, ganarlo y contar con nombres de primer nivel, como Joan Garcia, el portero de moda, Eric Garcia, Aleix Garcia o Ferran Jutglà. Esto, sin embargo, no ha sido suficiente para el diario As, que ha faltado gravemente al respeto a la selección catalana con su crónica del partido.
La crónica del diario As del Catalunya-Costa Rica
El texto promete desde la primera frase: «“Costellada”, se le llama por aquí a pachangas como las que jugaron este miércoles Cataluña y Costa Rica en el Estadi Johan Cruyff, en las que sólo falta la barbacoa«. Quien también recibe es Gerard López, el seleccionador catalán: «Gerard, seleccionador con más trabajo como analista en los medios que como técnico, no se complicó«. Y también se pueden leer oraciones como la siguiente: «Seguro que el post-partido fue más interesante, pero esas interioridades se conocerán en las próximas semanas«.
Aunque era un partido amistoso y no había nada en juego, el hecho de que la selección catalana haya podido alinear dos alineaciones de primer nivel con las cuales ha logrado vencer a un equipo mundialista como Costa Rica pone de manifiesto el nivel del fútbol catalán. Esto, sin embargo, parece que no es importante para la prensa española. En cambio, en el último amistoso que jugó la selección española, se podían leer frases como las siguientes en la crónica del mismo diario As: «Locura en Son Moix. Goleada de optimismo. Cualquiera de esos tres titulares valen para resumir el 5-1 con el que La Roja resolvió el último amistoso«. En aquella ocasión, un enfrentamiento contra la modesta Irlanda del Norte no les pareció una costellada.
Si la selección catalana no puede jugar partidos oficiales, no es, precisamente, culpa de que los catalanes no hayan intentado luchar por conseguirlo. De hecho, hace no tantos años la selección catalana, como mínimo, podía jugar partidos amistosos contra equipos del nivel de Argentina o Brasil, llenando estadios como el Camp Nou. Las trabas que han puesto el gobierno español y la RFEF, sin embargo, lo han ido impidiendo durante los últimos años y ahora la Federación Catalana de Fútbol (FCF) tiene que hacer malabares para intentar encontrar convocatorias y rivales tan dignos como sea posible. Por tanto, aunque no sea una Eurocopa o un Mundial, la selección catalana hace lo que puede y, este miércoles contra Costa Rica, ha demostrado que tiene nivel para competir contra contrincantes mundialistas.
