El Girona Futbol Club ha ganado la Copa Catalunya tras superar al Reial Club Deportiu Espanyol en la tanda de penaltis (0-0, 4-5*). En un partido muy disputado que terminó sin goles en los 90 minutos, el portero Juan Carlos detuvo el último penalti para darle a su equipo este nuevo título. Tanto Míchel Sánchez como Manolo González, teniendo en cuenta que están en plena pretemporada, realizaron muchos cambios durante el enfrentamiento para ir dando minutos al máximo número de jugadores posible y comenzar la puesta a punto de cara a la próxima temporada.
La crónica del Espanyol 0-0 Girona (4-5*)
Con un terreno de juego muy dañado por la intensa lluvia que cayó las horas previas al partido en la Nova Creu Alta, el Girona se hizo con el control de la posesión del balón y tuvo las primeras aproximaciones a la portería de Ángel Fortuño, el elegido bajo palos por parte de Manolo González. De hecho, el portero tuvo que intervenir en algunas ocasiones para evitar los remates de los jugadores gerundenses. Aún así, Míchel Sánchez tuvo el primer quebradero de cabeza de la temporada, ya que Abel Ruiz se lesionó y tuvo que abandonar el terreno de juego, dando entrada a Portu. El Girona continuó atacando, aprovechando los errores defensivos de un Espanyol muy nervioso. Kike García, el nuevo delantero fichado este verano, estuvo muy solo en el ataque blanquiazul y la primera parte terminó con un partido muy trabado en el centro del campo y sin muchas oportunidades.
En el reinicio, Míchel cambió prácticamente todo el equipo con varios cambios, mientras que Manolo optó por mantener la base del principio, con el mismo once. Sin embargo, al cabo de unos minutos, el barcelonés sí decidió hacer un quinteto de cambios, pero los nuevos jugadores en el terreno de juego tampoco pudieron cambiar el marcador. De hecho, la única acción destacada fue la expulsión a Leandro Cabrera, quien ya estaba en el banquillo, tras lanzarle una botella al árbitro. En la media hora de la segunda mitad, ninguno de los dos equipos hizo remates a portería, pero a partir de ahí, el partido se rompió y el Espanyol fue el equipo más peligroso.
Los blanquiazules, con los últimos cambios, explotaron los centros laterales y tuvieron la oportunidad de abrir el marcador en varias ocasiones, especialmente a partir de los remates de cabeza de Roberto Fernández y Pere Milla donde Juan Carlos, portero del Girona, tuvo que intervenir para evitar los goles pericos. Sin embargo, el Espanyol no pudo terminar perforando la portería de los gerundenses y el partido se fue a la tanda de penaltis, donde, de nuevo, Juan Carlos fue trascendental para darle la Copa Catalunya a su equipo. El de Guadalajara detuvo el último penalti de la tanda a Pablo Ramón para alzar al Girona como campeón del título.
🏆 CAMPIONS DE LA COPA CATALUNYA!
— Esport3 (@esport3) July 23, 2025
🔴⚪️ Juan Carlos atura l'últim penal i dona el títol al conjunt gironí
⚔️ @RCDEspanyol 0⃣(4)-(5)0⃣ @GironaFC
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