Sorpresa mayúscula en el Mundial de baloncesto de este año, celebrado en Filipinas, Japón e Indonesia. La selección de Estados Unidos ha caído en las semifinales ante Alemania (111-113) y no jugará la gran final, después de un partido donde no han podido parar el ataque alemán. La selección norteamericana de baloncesto, como en cada competición, era considerada la gran favorita por la cantidad de estrellas provenientes de la NBA. A pesar de esto, no han podido evitar la derrota y se jugarán el bronce contra Canadá.
De hecho, la selección canadiense, entrenada por el catalán Jordi Fernández, ha caído esta mañana ante Serbia, que será el rival de Alemania en la gran final por el oro mundial. Así, dos selecciones europeas, a pesar de que también con jugadores de la NBA, han superado otras selecciones con más estrellas de la mejor liga del mundo.

Estados Unidos – Alemania: el mejor partido del Mundial (111-113)
El marcador con el cual ha acabado el partido entre Estados Unidos y Alemania (111-113) ha sido uno de los más elevados de los últimos años en un Mundial FIBA. Ha sido, sin duda, el mejor partido de la competición, con una intensidad y un acierto ofensivo muy alto. Alemania ha dominado durante casi todo el partido y ha sido mejor, a pesar de la corta diferencia final en el marcador. De hecho, Estados Unidos ha estado a punto de la remontada, cuando en el último cuarto, perdiendo de más de 10, ha conseguido colocarse a solo 3 puntos pocos minutos antes de acabar el partido, pero no ha sido suficiente.
Decepción absoluta en la selección de Estados Unidos, que a pesar de que no había llevado a la cita mundialista a las mejores estrellas de la NBA, como LeBron James, Stephen Curry o Kevin Durant, tenían un equipo de garantías para, al menos, situarse en la final. Así, y por segundo Mundial consecutivo, Estados Unidos se quedarán sin el título. Alemania ha sido una selección más coral y ha conseguido una de las sorpresas históricas en un Mundial.