Una vez que el Fútbol Club Barcelona ha hecho oficial el fichaje del delantero Robert Lewandowski y que la euforia del barcelonismo se ha desatado, hay que analizar cómo será su incorporación al equipo entrenado por Xavi Hernández. Es sabido que el polaco es una estrella del fútbol, pero el hecho de que el conjunto azulgrana esté en una transición pone dudas y asteriscos sobre la mesa. ¿Qué papel tendrá? ¿Cómo encajará en la xavineta? ¿Qué alianzas establecerá en el campo? ¿Está listo para jugar al estilo Barça? Món Esport repasa todo esto y más.
El liderazgo de Lewandowski
En primer lugar, hay que tener en cuenta que el polaco llega al Camp Nou con la vitola de titular indiscutible. Del delantero centro para las grandes noches. Del escogido en un once de gala. Será pues el líder del equipo, teniendo en cuenta muchas circunstancias. Por un lado, su calidad. El polaco fue designado como segundo mejor futbolista del año 2021 según la prestigiosa revista France Football, en el contexto del premio del Balón de Oro, sólo por detrás de Leo Messi. Acaba de completar unos años excelentes a nivel individual, liderando el Bayern de Munich ganador del sextete en 2020.
Después, será el líder del equipo por su espíritu ganador . En el fútbol cuenta mucho la calidad pero también la mentalidad. Y de eso Lewandowski también va sobrado. El polaco es aquel delantero capaz de haber marcado cinco goles en nueve minutos, con Pep Guardiola alucinante en el banquillo y en un encuentro de Bundesliga, contra el Wolfsburg. Es ese jugador que nunca se rinde. Es ese jugador que intimida a los rivales. Es ese jugador que llega a los balones que parecen perdidos. Es ese jugador, pues, que necesita un Barça en transición.
Y finalmente, también será el líder por su veteranía. El europeo cumplirá 34 años a finales de agosto. Y lo bueno de esta cifra es que el jugador lleva ya tiempo en la élite del fútbol. Ya acumula muchos cursos en la cúspide del deporte. Concretamente, ha jugado cuatro años en el Borussia Dortmund y ocho en el Bayern de Múnich. En el equipo amarillo-negro logró metas como las de ganar, en dos ocasiones, la liga nacional a contrapronóstico (en los años 2011 y 2012), y la de llevar el conjunto entrenado entonces para Jürgen Klopp nada menos que a una final de la Champions (la del año 2013), dejando por el camino el Real Madrid, al que de hecho marcó cuatro goles en un encuentro. Lewandowski, pues, acumula muchas batallas. Y la mayoría de ellas, ganadas.
Lewandowski, mucho más que un simple finalizador
Después, hay que tener en cuenta el componente más deportivo. Lewandowski esun delantero habituado y preparado para jugar en muchos tipos diferentes de esquemas. Lewandowski ha sido la referencia en equipos vertiginosos como el Dortmund de Klopp mencionado y el Bayern de Hansi Flick (el del sextete), pero también en el Bayern de Pep Guardiola, que si bien era un equipo más directo que el Barça del propio técnico de Santpedor, también tenía el componente del juego de posesión. Lewandowski no es simplemente un rematador. También es un hombre que sabe asociarse. A pesar de no tener fama, tiene calidad a la hora de regatear y combinar con sus compañeros.
Y eso, evidentemente, le irá muy bien a Xavi Hernández. Previsiblemente marcará muchos goles, pero también participará mucho en el juego. Y es que sabe jugar de espaldas, que es lo que el técnico terrasense desea que tenga su delantero centro. Por ejemplo, en el tramo final de la última temporada el vallesano utilizó como hombre referencia a Ansu Fati, muy habilidoso en esta materia.
La relación Lewandowski-Aubameyang
¿Qué pasará con Pierre-Emerick Aubameyang? Éste es un caso bastante familiar. A pesar de no ser algo muy conocido, resulta que Lewandowski y Aubameyang compartieron una temporada en el Borussia Dortmund. Y ambos eran titulares. Fue la 2013/2014: la última de Lewa en la entidad del Ruhr y la primera del gabonés. Klopp encontró un encaje que resultó exitoso: en su mítico 4- 2-3-1, Lewandowski permaneció como hombre referencia, mientras que Aubameyang se ubicó como extremo derecho.
Y lo hizo de forma notable: en 48 partidos disputados ese curso, Auba marcó 16 goles y 5 asistencias. Eso sí, no es el lugar en el que se siente más cómodo. Entonces, por un lado, el tridente Ansu Fati-Lewandowski-Aubameyang sería factible en alguna ocasión. Pero la continuidad de Ousmane Dembélé y la llegada de Raphinha, unidas a la gran afición de Xavi por jugar con extremos, lo dificultan. Otra opción sería que el polaco y el gabonés jugaran juntos en un 4-4-2, si bien parece difícil que ocurra especialmente en partidos de entidad.
En términos de rotación, la presencia de ambos es magnífica. Las temporadas son largas, y más si a los equipos les van bien las cosas. Por tanto, en una hipotética semana con un clásico de Liga y un partido importante de Champions sería posible que ambos delanteros se repartieran los minutos. Y esto favorecería la competencia entre ambos, y la no relajación.
El tridente ofensivo inicial de Xavi
Por tanto, dicho todo esto, se puede decir con mucha seguridad que el tridente ofensivo inicial de Xavi estará formado por Ansu Fati, Dembélé y Lewandowski. En el margen izquierdo, todo hace indicar que el hispano-guineano, ya recuperado, ganará la partida en Ferran Torres en las grandes citas. En el derecho, el hecho de que el técnico conozca a Dembélé al haberlo disfrutado durante seis meses hará que el recién llegado Raphinha tenga que competir por la posición. Y por último, la posición de delantero centro está destinada al flamante Bota de Oro, por delante de dicho Aubameyang.
Martin Braithwaite no cuenta para Xavi y apunta a marcharse, mientras que Memphis Depay, si bien fue el máximo anotador culé la temporada pasada, tendrá que sudar mucho o incluso buscar un nuevo destino.
